9/09/2015, 23:49
(Última modificación: 10/09/2015, 00:26 por Umikiba Kaido.)
El Gyojin comprendió muy bien lo que Ayame había querido decir.
Le había llamado tiburón, quizás inconscientemente, pero estaba hecho de todas formas. Kaido enarcó una ceja aún sonriente y dejó pasar el comentario por la asiduidad con la que solía recibirlo, aunque cierto era que pocos tenían el valor de hacerlo con él justo al frente. De cualquier forma no podía culpar a la pobre muchacha de no controlar su lengua ni mucho menor pensar en darle el castigo que se merecía. No había comparación y sería muy injusto. O eso creía él...
Finalmente, la chica advirtió que se encontraba en las cercanías del lago para encontrar relajación. Irónicamente el propio Kaido también buscaba lo mismo, aunque probablemente ninguno de los dos podría hacerlo ante la presencia del otro. De cualquier manera, no era extraño que las personas de Amegakure quisieran gozar de un poco de tranquilidad de vez en cuando, teniendo en cuenta lo movida que era la aldea y lo escabrosos que eran sus ciudadanos. En el interior de aquella avanzada ciudad tecnológica todo se movía muy rápido, de forma agitada; y eso sin duda alguna generaba tensión en todos lados. Culpa de tener a un líder tan estricto como lo era Yui Arashikage-sama.
«O mejor conocida como la arranca-testículos» ─nunca lo admitiría, pero sus escamas temblaron un poco al pensarlo. Él y sus cojones azules tendrían que evitar los problemas con ella mientras fuera posible.
─Pues yo es que he estado recorriendo la aldea durante la última semana para familiarizarme un poco con sus alrededores, ya sabes. Conociendo las mejores zonas, a su gente y viendo también donde puedo liarla de vez en cuando sin que me caiga todo el ejército de Yui-sama encima ─abrió los brazos y alzó los hombros─. pero bueno, creo que sólo me faltan un par de sitios que visitar y ya puedo quitar éste de la lista. Me ha gustado, es tranquilo y el agua es lo suficientemente profunda como para tomar una siesta.
Quizás estaba bromeando, pero lo cierto es que era perfectamente posible hacerlo. ¿Pero sería Ayame capaz de creerlo o tendría él que darle una prueba de su apropiada capacidad de pescado?.
Le había llamado tiburón, quizás inconscientemente, pero estaba hecho de todas formas. Kaido enarcó una ceja aún sonriente y dejó pasar el comentario por la asiduidad con la que solía recibirlo, aunque cierto era que pocos tenían el valor de hacerlo con él justo al frente. De cualquier forma no podía culpar a la pobre muchacha de no controlar su lengua ni mucho menor pensar en darle el castigo que se merecía. No había comparación y sería muy injusto. O eso creía él...
Finalmente, la chica advirtió que se encontraba en las cercanías del lago para encontrar relajación. Irónicamente el propio Kaido también buscaba lo mismo, aunque probablemente ninguno de los dos podría hacerlo ante la presencia del otro. De cualquier manera, no era extraño que las personas de Amegakure quisieran gozar de un poco de tranquilidad de vez en cuando, teniendo en cuenta lo movida que era la aldea y lo escabrosos que eran sus ciudadanos. En el interior de aquella avanzada ciudad tecnológica todo se movía muy rápido, de forma agitada; y eso sin duda alguna generaba tensión en todos lados. Culpa de tener a un líder tan estricto como lo era Yui Arashikage-sama.
«O mejor conocida como la arranca-testículos» ─nunca lo admitiría, pero sus escamas temblaron un poco al pensarlo. Él y sus cojones azules tendrían que evitar los problemas con ella mientras fuera posible.
─Pues yo es que he estado recorriendo la aldea durante la última semana para familiarizarme un poco con sus alrededores, ya sabes. Conociendo las mejores zonas, a su gente y viendo también donde puedo liarla de vez en cuando sin que me caiga todo el ejército de Yui-sama encima ─abrió los brazos y alzó los hombros─. pero bueno, creo que sólo me faltan un par de sitios que visitar y ya puedo quitar éste de la lista. Me ha gustado, es tranquilo y el agua es lo suficientemente profunda como para tomar una siesta.
Quizás estaba bromeando, pero lo cierto es que era perfectamente posible hacerlo. ¿Pero sería Ayame capaz de creerlo o tendría él que darle una prueba de su apropiada capacidad de pescado?.