4/09/2018, 16:24
—¡Si son malas noticias, no estoy!
«Sin duda, es él...» Pensó mientras soltaba una risilla nerviosa.
—Y yo que te traía comida... —bromeó ella, aunque no era ninguna broma. En su mano derecha traía sellado una bolsa de papel llena de... Bueno, de todo un poco: hojaldres salados, algún bollo y lo que se le había ocurrido comprar por el camino— Bueno, te pongas como te pongas, voy a entrar.
Giró el pomo y se encontró con una momia.
Bueno, al principio aquella imagen impactó a la Uzumaki que, permaneciendo en la puerta, miró de arriba a abajo a su compañero y amigo Uchiha, incapaz de moverse de la camilla para nada. Era normal, no se esperaba otro panorama después de enterarse de lo ocurrido, así que, sacando valor y sobre todo ganas de ver a Datsue, se encaminó hacia el lado derecho de su cama.
—Veo que al final te han domado eh —aquel tono de broma solo intentaba esconder la preocupación que sentía bajo su pecho, pero tampoco quería ir a llorarle sabiendo que él, quien estaba recluso en el hospital sin poder ni si quiera ir al baño, ya lo habría hecho un centenar de veces mientras que Eri podía ir de aquí para allá sin ninguna atadura —. Bueno, cuál es la historia esta vez, tengo tiempo y curiosidad.
Indecisa de tomar o no una zona de la cama que Datsue no estuviese ocupando, se quedó quieta, mirando fijamente el rostro magullado de su amigo.
«Sin duda, es él...» Pensó mientras soltaba una risilla nerviosa.
—Y yo que te traía comida... —bromeó ella, aunque no era ninguna broma. En su mano derecha traía sellado una bolsa de papel llena de... Bueno, de todo un poco: hojaldres salados, algún bollo y lo que se le había ocurrido comprar por el camino— Bueno, te pongas como te pongas, voy a entrar.
Giró el pomo y se encontró con una momia.
Bueno, al principio aquella imagen impactó a la Uzumaki que, permaneciendo en la puerta, miró de arriba a abajo a su compañero y amigo Uchiha, incapaz de moverse de la camilla para nada. Era normal, no se esperaba otro panorama después de enterarse de lo ocurrido, así que, sacando valor y sobre todo ganas de ver a Datsue, se encaminó hacia el lado derecho de su cama.
—Veo que al final te han domado eh —aquel tono de broma solo intentaba esconder la preocupación que sentía bajo su pecho, pero tampoco quería ir a llorarle sabiendo que él, quien estaba recluso en el hospital sin poder ni si quiera ir al baño, ya lo habría hecho un centenar de veces mientras que Eri podía ir de aquí para allá sin ninguna atadura —. Bueno, cuál es la historia esta vez, tengo tiempo y curiosidad.
Indecisa de tomar o no una zona de la cama que Datsue no estuviese ocupando, se quedó quieta, mirando fijamente el rostro magullado de su amigo.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)