15/09/2018, 05:53
Finalmente, después de un poco de lágrimas y moco desparramado; Daruu invitó a Ayame a que tomara asiento, mientras repasaba nuevamente todo lo sucedido con ella, los uzurateros y el examen.
—Bueno, basta de andar disculpándose, coño —espetó Kaido—. no quiero más lamentos en este barco, o les tiro por la borda a los dos, cabrones —bromeó, tratando de aligerar un poco el ambiente tan pesado que envolvía a la habitación—. ahora sólo hay que esperar a ver qué es lo que hará Yui-sama cuando se entere de toda esta mierda. Pff, esos Uzujin no tienen idea de a quién se la están jugando.
»¿Qué creéis que suceda con el pacto? ¿Y con el Chunin?
Al garete. Al garete se había ido cualquier pretensión suya de obtener ese jodido chaleco.
—Bueno, basta de andar disculpándose, coño —espetó Kaido—. no quiero más lamentos en este barco, o les tiro por la borda a los dos, cabrones —bromeó, tratando de aligerar un poco el ambiente tan pesado que envolvía a la habitación—. ahora sólo hay que esperar a ver qué es lo que hará Yui-sama cuando se entere de toda esta mierda. Pff, esos Uzujin no tienen idea de a quién se la están jugando.
»¿Qué creéis que suceda con el pacto? ¿Y con el Chunin?
Al garete. Al garete se había ido cualquier pretensión suya de obtener ese jodido chaleco.