4/10/2015, 16:16
(Última modificación: 4/10/2015, 16:28 por Uzumaki Eri.)
''¿Qué?''
Todo había pasado muy rápido, tan rápido, que le estaba costando demasiado asimilar lo ocurrido. Había salido corriendo para no ser vista por el Uchiha, y este, como bien sabía, había ido detrás de lo que podría haber sido el causante del chorro de agua que impactó contra él, sin embargo cuando la vio, no la acusó, al contrario, la preguntó si se encontraba bien, y cuando podría haber abierto la boca para contestar, él la había tomado por sus brazos y la había abrazado para protegerla de una gallina.
Esto era demasiado irreal.
''Pero él... ¿De verdad que no sabe que fui yo...?''
Mordió su labio inferior y le miró a los ojos. El verde y el azabache se encontraron. ¿De verdad que estaba bien? Apretó más el mordisco, pero antes de que se pudiese hacer sangre, paró y notó como sus mejillas se encendían. Estaba demasiado cerca del rubio, y lo que le jodía es que no podía separarse de él como hubiera hecho minutos atrás, cuando le lanzó esa técnica.
-Erh, erm...- Balbuceó, nerviosa, deshaciéndose del agarre como podía, e incorporándose para estar de pie, distanciándose de él. El alivio se apoderó de su cuerpo, y las palabras ya no se quedaban en su garganta. -Sí, sí, estoy bien, ¿y tú? ¿Qué pasa? - contestó ahora más firme, ignorando sus sentimientos, porque sabía que si se acordaba de ellos empezaría a chillarle cualquier incoherencia, o se pondría a llorar, o cualquier cosa de esas. -¿Por qué me preguntas si he visto a alguien pasar? Por aquí no ha pasado nadie... - Contestó a su primera pregunta, dudando de entre decirle que había sido ella la que había lanzado la técnica o no.
Estaba actuando como una persona medianamente decente actuaría, él era un civil más, y ella una shinobi capaz de ayudarle, no eran amigos, no eran compañeros, no eran nada. Suspiró demasiado fuerte a su parecer y se apoyó contra la valla, exhausta, ¿qué haría si él se quedaba tanto tiempo con ella? Su corazón seguía latiendo de una forma desenfrenada, así que haría lo que había querido desde hace bastante: hablar con él hasta que él se fuese.
Sin embargo, sabía que no podría guardar el secreto de haberle lanzado un Mizurappa, así que sin querer, bajó la mirada, apenada, mientras jugaba con sus dedos. -Verás... La del Mizurappa... Fui yo... - Dijo con un tono de voz casi inaudible.
Todo había pasado muy rápido, tan rápido, que le estaba costando demasiado asimilar lo ocurrido. Había salido corriendo para no ser vista por el Uchiha, y este, como bien sabía, había ido detrás de lo que podría haber sido el causante del chorro de agua que impactó contra él, sin embargo cuando la vio, no la acusó, al contrario, la preguntó si se encontraba bien, y cuando podría haber abierto la boca para contestar, él la había tomado por sus brazos y la había abrazado para protegerla de una gallina.
Esto era demasiado irreal.
''Pero él... ¿De verdad que no sabe que fui yo...?''
Mordió su labio inferior y le miró a los ojos. El verde y el azabache se encontraron. ¿De verdad que estaba bien? Apretó más el mordisco, pero antes de que se pudiese hacer sangre, paró y notó como sus mejillas se encendían. Estaba demasiado cerca del rubio, y lo que le jodía es que no podía separarse de él como hubiera hecho minutos atrás, cuando le lanzó esa técnica.
-Erh, erm...- Balbuceó, nerviosa, deshaciéndose del agarre como podía, e incorporándose para estar de pie, distanciándose de él. El alivio se apoderó de su cuerpo, y las palabras ya no se quedaban en su garganta. -Sí, sí, estoy bien, ¿y tú? ¿Qué pasa? - contestó ahora más firme, ignorando sus sentimientos, porque sabía que si se acordaba de ellos empezaría a chillarle cualquier incoherencia, o se pondría a llorar, o cualquier cosa de esas. -¿Por qué me preguntas si he visto a alguien pasar? Por aquí no ha pasado nadie... - Contestó a su primera pregunta, dudando de entre decirle que había sido ella la que había lanzado la técnica o no.
Estaba actuando como una persona medianamente decente actuaría, él era un civil más, y ella una shinobi capaz de ayudarle, no eran amigos, no eran compañeros, no eran nada. Suspiró demasiado fuerte a su parecer y se apoyó contra la valla, exhausta, ¿qué haría si él se quedaba tanto tiempo con ella? Su corazón seguía latiendo de una forma desenfrenada, así que haría lo que había querido desde hace bastante: hablar con él hasta que él se fuese.
Sin embargo, sabía que no podría guardar el secreto de haberle lanzado un Mizurappa, así que sin querer, bajó la mirada, apenada, mientras jugaba con sus dedos. -Verás... La del Mizurappa... Fui yo... - Dijo con un tono de voz casi inaudible.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)