Este foro utiliza cookies
Este foro utiliza cookies para guardar tu información de inicio de sesión si estás registrado, y tu última visita si no lo estás. Las cookies son pequeños documentos de texto guardados en tu ordenador; las cookies establecidas por este foro sólo pueden ser utilizadas en este mismo sitio y no poseen riesgos de seguridad. Las cookies de este foro también llevan un registro de los temas que has leído y cuándo fue la última vez que los leíste. Los administradores NO tienen acceso a esta información, sólo TU NAVEGADOR. Por favor confirma si aceptas el establecimiento de estas cookies.

Se guardará una cookie en tu navegador sea cual sea tu elección para no tener que hacerte esta pregunta otra vez. Podrás cambiar tus ajustes sobre cookies en cualquier momento usando el link en el pie de página.
Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
—Aún así, ¿quieres algo? ¿Un chocolate caliente? ¿Café? —sugirió Daruu, mientras cogía una taza para sí mismo y comenzaba a prepararse un chocolate caliente.

Pero Kōri se le había quedado mirando fijamente, con sus ojos de hielo clavados en la nuca del chico.

—Un chocolate. Del tiempo. Por favor —especificó. A aquellas alturas, después de tanto tiempo conociéndose, Daruu ya debía de saber que Kōri repudiaba cualquier tipo de comida o bebida que estuviera caliente.

—Parecía tener un recurso ilimtado de chakra —respondió Daruu, a colación de la pregunta sobre el Bijū—. No importa lo que hiciese, siempre podía ejecutar otra técnica para anularlo. Por lo demás, usaba las técnicas de Ayame... y también sus tácticas. Aprendió cómo luchar como un ninja desde dentro, por lo visto.

Kōri tardó algunos segundos en responder. Había bajado la mirada, con aire pensativo y sombrío.

—Ha tenido tiempo de estudiarnos, desde el interior de Ayame —comentó en voz baja—. Y ya vimos lo terrible que puede ser, tanto en el lago de Kirigakure, como durante aquella misión, cuando Ayame perdió el control —añadió, haciendo referencia a la misión en la que los tres habían quedado encerrados dentro de un libro—. Pero hay algo que no me cuadra... Es una bestia compuesta por una ingente cantidad de chakra, un monstruo despiadado capaz de destruir ciudades enteras a su paso según cuentan las leyendas. Pero eso no fue lo que me pareció cuando vimos al Gobi allí, en el País del Agua. Se había ido a la otra punta del mundo, como si no quisiera ser descubierto por nadie, como si se estuviera escondiendo. Los monstruos de los que hablan las historias habrían buscado venganza, habrían venido a cualquiera de las aldeas shinobi a reducirlas a cenizas. ¿Por qué el Gobi no lo hizo? Ni siquiera encontramos un reguero de muertes en su trayecto, parecía que había ido viajando sin más, de forma... ¿pacífica?
[Imagen: kQqd7V9.png]
Sprite por Karvistico.


—Habitación de Ayame: Link

No respondo dudas por MP.
Responder


Mensajes en este tema
Tras la estela del lirio - por Amedama Daruu - 19/11/2018, 16:35
RE: Tras la estela del lirio - por Aotsuki Ayame - 19/12/2018, 14:18


This forum uses Lukasz Tkacz MyBB addons.