16/01/2019, 00:03
(Última modificación: 16/01/2019, 00:05 por Amedama Daruu. Editado 1 vez en total.)
Shanise se sorprendió tanto que se atragantó. ¿Su buen amigo Yubiwa, un traidor? Si bien es cierto que se había pasado la mitad de la estancia en Uzushiogakure, la última vez que se vieron, borracho como una cuba –a niveles que eran enfermizos incluso para él–, no había notado nada en especial que le hiciese parecer menos fiel a la hierba.
—Por supuesto, Kenzou —declaró Yui sin pensarlo un ápice—. La traición es intolerable. Lo añadiremos también a nuestro Libro Bingo... —Se aclaró la garganta—. Pero, ¿Yubiwa-kun? ¿Un traidor? Me cuesta creerlo —añadió, haciéndose eco de los pensamientos de su subalterna.
—De cualquier forma, creo que eso podemos discutirlo en otra ocasión, ¿no, Yui-sama? —intervino Shanise, reconduciendo junto a Kenzou la curiosidad de la Arashikage.
—Sí... sí. No me andaré con rodeos. Todos sabéis ya cual fue el destino de mi jinchuuriki y gracias a Kenzou también sabemos ahora que hay un puto monstruo por ahí que se hace llamar Señor de unos Ocho Generales hijos de perra que andan revirtiendo sellados de jinchuuriki.
»Os confirmo que conseguimos recuperar a Ayame con éxito. Aunque, en efecto, el sello está... revertido. Y no hemos... encontrado – la manera de volverlo a revertir.
Hubo un silencio tenso de al menos medio minuto. Shanise se aclaró la garganta, y dijo lo que el orgullo de Yui le impedía decir a ella:
—Hanabi-dono. ¿El Consejo de Sabios Uzumaki podría ayudar con la reversión del sello de Ayame?
—Por supuesto, Kenzou —declaró Yui sin pensarlo un ápice—. La traición es intolerable. Lo añadiremos también a nuestro Libro Bingo... —Se aclaró la garganta—. Pero, ¿Yubiwa-kun? ¿Un traidor? Me cuesta creerlo —añadió, haciéndose eco de los pensamientos de su subalterna.
—De cualquier forma, creo que eso podemos discutirlo en otra ocasión, ¿no, Yui-sama? —intervino Shanise, reconduciendo junto a Kenzou la curiosidad de la Arashikage.
—Sí... sí. No me andaré con rodeos. Todos sabéis ya cual fue el destino de mi jinchuuriki y gracias a Kenzou también sabemos ahora que hay un puto monstruo por ahí que se hace llamar Señor de unos Ocho Generales hijos de perra que andan revirtiendo sellados de jinchuuriki.
»Os confirmo que conseguimos recuperar a Ayame con éxito. Aunque, en efecto, el sello está... revertido. Y no hemos... encontrado – la manera de volverlo a revertir.
Hubo un silencio tenso de al menos medio minuto. Shanise se aclaró la garganta, y dijo lo que el orgullo de Yui le impedía decir a ella:
—Hanabi-dono. ¿El Consejo de Sabios Uzumaki podría ayudar con la reversión del sello de Ayame?