23/01/2019, 16:19
—Bu-buenos d-días. —Me contesto educada y timidamente la chicha de recepción, que ni devia ser mucho mayor que yo. Quizas el trabajo de recepcionista también debia ser agradable, quien sabe.—. C-creo que está libre. A-adelante, sube.
—Perfecto, Muchas gracias. —Dije mientras me despedia con una pequeña reverencia.
Me encaminé por la puerta que la muchacha había señalado, y subí las edcaleras hasta el tercer piso, donde se encontraba el despacho del uzukage. La puerta estaba entre abierta, y a pesar de que no se veía a nadie, si que se escuchaba el silbido de una alegre melodia. Como era de la mala educación espiar a traves de las rendijas aunque fueras un ninja, y mi madre me lo había enseñado a golpes de boken que todavía dolian al recordarlos, evité echar una mirada curiosa y llamé a la puerta.
—Buenos días, ¿Se puede pasar?
La verdad es que estaba bastante mas nervioso de lo que aparentaba. Una cosa era pensar en hacer algo, y otra cosa era hacerla... Pero tenia que sobreponerme a los nervios para poder seguir a delante. Aunque era mas fecil decirlo o pensarlo que hacerlo.
—Perfecto, Muchas gracias. —Dije mientras me despedia con una pequeña reverencia.
Me encaminé por la puerta que la muchacha había señalado, y subí las edcaleras hasta el tercer piso, donde se encontraba el despacho del uzukage. La puerta estaba entre abierta, y a pesar de que no se veía a nadie, si que se escuchaba el silbido de una alegre melodia. Como era de la mala educación espiar a traves de las rendijas aunque fueras un ninja, y mi madre me lo había enseñado a golpes de boken que todavía dolian al recordarlos, evité echar una mirada curiosa y llamé a la puerta.
—Buenos días, ¿Se puede pasar?
La verdad es que estaba bastante mas nervioso de lo que aparentaba. Una cosa era pensar en hacer algo, y otra cosa era hacerla... Pero tenia que sobreponerme a los nervios para poder seguir a delante. Aunque era mas fecil decirlo o pensarlo que hacerlo.