11/02/2019, 22:20
(Última modificación: 11/02/2019, 22:20 por Sasaki Reiji.)
Mis ultimas palabras parecieron causar una buena reacción en el uzukage. Al menos eso era lo que creia que indicaba su sonrisa.
—Si perteneces a Uzushiogakure, estoy orgulloso de ti.Seas ninja o no, tú tampoco tienes que avergonzarte de nada.
Daba igual que lo dijera el mismisimo uzukage. Daba igual si se me aparecia el mismisimo Izanagi a decirme esas mismas palabras. Tenia mucho, mucho de lo que avergonzarme. Una muy muy muy larga lista.
—. Mira... Puedes seguir mi consejo, que en absoluto es una orden, o puedes probar a trabajar en la forja con tu padre. Eres muy joven, y tienes toda la vida por delante.
No es que mi cabezoneria fuese legenderia, que quizas lo fuera, pero aquel suspiro de Hanabi parecia indicar que era demasiado dificil convencer de algo a alguien que estaba encabezonado en todo lo contrario. Y ese alguien era yo.
»Pero si aceptas quedarte con tu bandana, no tendré problemas en que te des un viajecito por ahí... Tú verás. Igual... se te despejan las ideas.
Si claro... Aquello era justo lo que me había llevado a ese desapcho, pero aquello sonaba a chantaje. O vas con la banda a o no vas. También él era el uzukage, claro, y era él quien tomaba las decisiones. Aquella frase tan famosa de los padres podia aplicarse a esta situación: Cuando seas Kage comeras huevos. Pero eso si que era algo con lo que yo no podia ni siquiera llegar a soñar.
—He venido justo a pedirle eso, pero creo que dejarme viajar con la bandana puesta es un error. Soy débil, soy bueno para nada, peor que el joven mas novato de la academia que aun esta a un par de años de graduarse. Si me atacan shinobis renegados o enemigos soy el blanco más fácil. Quizas me equivoque, últimamente parece algo comun en mí, pero creo que excepto bandidos de poca categoria atacarian a un civil cuya procedencia es desconocia. Y ademas hay menos posibilidades de dejar en ridiculo el nombre de esta de villa...
Desgraciadamente, tampoco tenia el poder de meterme en su cabeza para saber en que estaba pensado exactamente cuando decia que me dejeria salir de viaje. Quizas no era la libertad que yo me esperaba, quizas ese viaje tenia limitaciones y restricciones...
—De verdad que quiero hacer ese viaje, pero sigo creyendo que no soy digno de llevar esa bandana...
—Si perteneces a Uzushiogakure, estoy orgulloso de ti.Seas ninja o no, tú tampoco tienes que avergonzarte de nada.
Daba igual que lo dijera el mismisimo uzukage. Daba igual si se me aparecia el mismisimo Izanagi a decirme esas mismas palabras. Tenia mucho, mucho de lo que avergonzarme. Una muy muy muy larga lista.
—. Mira... Puedes seguir mi consejo, que en absoluto es una orden, o puedes probar a trabajar en la forja con tu padre. Eres muy joven, y tienes toda la vida por delante.
No es que mi cabezoneria fuese legenderia, que quizas lo fuera, pero aquel suspiro de Hanabi parecia indicar que era demasiado dificil convencer de algo a alguien que estaba encabezonado en todo lo contrario. Y ese alguien era yo.
»Pero si aceptas quedarte con tu bandana, no tendré problemas en que te des un viajecito por ahí... Tú verás. Igual... se te despejan las ideas.
Si claro... Aquello era justo lo que me había llevado a ese desapcho, pero aquello sonaba a chantaje. O vas con la banda a o no vas. También él era el uzukage, claro, y era él quien tomaba las decisiones. Aquella frase tan famosa de los padres podia aplicarse a esta situación: Cuando seas Kage comeras huevos. Pero eso si que era algo con lo que yo no podia ni siquiera llegar a soñar.
—He venido justo a pedirle eso, pero creo que dejarme viajar con la bandana puesta es un error. Soy débil, soy bueno para nada, peor que el joven mas novato de la academia que aun esta a un par de años de graduarse. Si me atacan shinobis renegados o enemigos soy el blanco más fácil. Quizas me equivoque, últimamente parece algo comun en mí, pero creo que excepto bandidos de poca categoria atacarian a un civil cuya procedencia es desconocia. Y ademas hay menos posibilidades de dejar en ridiculo el nombre de esta de villa...
Desgraciadamente, tampoco tenia el poder de meterme en su cabeza para saber en que estaba pensado exactamente cuando decia que me dejeria salir de viaje. Quizas no era la libertad que yo me esperaba, quizas ese viaje tenia limitaciones y restricciones...
—De verdad que quiero hacer ese viaje, pero sigo creyendo que no soy digno de llevar esa bandana...