9/04/2019, 05:03
Una voz llamo su atencion, cuando pudo rastrear de donde venia, el pelirrubio se dio cuenta de que era aquel chunnin con el que debía de encontrarse. Se levanto cuidadosamente de la mesa, sin antes guardarse su antifaz en el bolsillo del pantalón, y subirse la mascara que comúnmente cubría su rostro, y la cual se había bajado preventivamente sabiendo que le sumergirían el rostro en un balde de agua. -Perdón la demora.- Dijo bajando la cabeza en forma de reverencia al llegar a la mesa, mientras que al levantarla se percato de la presencia de un viejo conocido, o al menos de alguien que ya había cruzado palabras anteriormente. -Raitaro San, no sabia que eras el otro genin con el que me reuniría, un gusto volver a vernos.- Le dijo al pelirrojo mientras tomaba asiento lentamente, y quedaba a disposición escuchando lo que tuviera que decir el ninja de mayor experiencia.
En verdad y hasta el momento lo que hizo el shinobi fue reclamar el tipo de grupo que habían armado, lo que parecía no ser de su gusto, al menos en la distribución de edad-y tipo de habilidades. Samidare no contesto nada a eso, le parecía que sonaría a una falta de respeto, ya que entendía que estaba hablando consigo mismo y no esperaba una respuesta de ellos. Luego pediría como ¿Misión rango D?, que alguno de los dos genin le trajera una servilleta. El rubio alzaría la mano, y llevaría su mirada a la camarera que lo atendió anteriormente. -One-san, me podrás traer unas cuantas servilletas.- Si aquel chunnin era perezoso, Samidare en ese aspecto no tenia que envidiarle nada, incluso podia considerarse aun mas vago casi con total seguridad y no tenia ningún miedo de demostrarlo.
En verdad y hasta el momento lo que hizo el shinobi fue reclamar el tipo de grupo que habían armado, lo que parecía no ser de su gusto, al menos en la distribución de edad-y tipo de habilidades. Samidare no contesto nada a eso, le parecía que sonaría a una falta de respeto, ya que entendía que estaba hablando consigo mismo y no esperaba una respuesta de ellos. Luego pediría como ¿Misión rango D?, que alguno de los dos genin le trajera una servilleta. El rubio alzaría la mano, y llevaría su mirada a la camarera que lo atendió anteriormente. -One-san, me podrás traer unas cuantas servilletas.- Si aquel chunnin era perezoso, Samidare en ese aspecto no tenia que envidiarle nada, incluso podia considerarse aun mas vago casi con total seguridad y no tenia ningún miedo de demostrarlo.