14/04/2019, 12:14
«Bravuconería barata, ¿eh, maldito? ¡Pues ahora voy y…!»
Ahora iba y nada. Tenía que pensar, joder. ¿Es que no había aprendido nada? ¿Es que no había jurado hacer honor a la placa de su Hermano? Vale que Aiko pasase de su culo. Vale que Akame ya no estaba y tuviese días que se sintiese en la mierda más absoluta. Pero no podía volver al principio del ciclo, olvidando todas sus promesas y todas sus deudas a los cuatro meses de haberlas hecho solo porque se sintiese frustrado.
Madurar era algo más que decir que lo has hecho. O ser más serio. O no hacer niñerías. No, madurar era hacer exactamente las mismas bromas que antes. Pero, en los momentos serios, en las decisiones clave, como aquella, actuar con algo de responsabilidad.
Datsue el Intrépido era un chico divertido, a buen seguro. Divertido y que se había forjado cierta historia para el recuerdo. Pero también uno con fecha de caducidad. Uno no podía reírse del mundo y esperar que no le acabasen partiendo los dientes algún día. Y ahora, ya no tenía a su Hermano cubriéndole las espaldas.
Evolucionar o morir.
—Tsch —chasqueó la lengua, irritado. Había una parte irracional de él que seguía cagándose en su propia madre por no recoger el guante y hacer lo que siempre solía hacer: actuar sin pensar—. Una última cosa —dijo, acordándsoe—. Y no, estate tranquila, no diré nada. Y vosotros… Mirad no sé si sois la típica pareja que se tiene que decir te quiero cien veces antes de acostarse. Sea como sea, nada de darse cariñitos a través del sello, ¿eh? O de usarlo para avisarse que tenéis la casa libre. Esto es para urgencias de verdad. Un encuentro con un General… o un encuentro con un General. —Y no había más. Cualquier otra chorrada, que se la ahorrasen, o juraba quitarles el sello al próximo encuentro.
Ahora iba y nada. Tenía que pensar, joder. ¿Es que no había aprendido nada? ¿Es que no había jurado hacer honor a la placa de su Hermano? Vale que Aiko pasase de su culo. Vale que Akame ya no estaba y tuviese días que se sintiese en la mierda más absoluta. Pero no podía volver al principio del ciclo, olvidando todas sus promesas y todas sus deudas a los cuatro meses de haberlas hecho solo porque se sintiese frustrado.
Madurar era algo más que decir que lo has hecho. O ser más serio. O no hacer niñerías. No, madurar era hacer exactamente las mismas bromas que antes. Pero, en los momentos serios, en las decisiones clave, como aquella, actuar con algo de responsabilidad.
Datsue el Intrépido era un chico divertido, a buen seguro. Divertido y que se había forjado cierta historia para el recuerdo. Pero también uno con fecha de caducidad. Uno no podía reírse del mundo y esperar que no le acabasen partiendo los dientes algún día. Y ahora, ya no tenía a su Hermano cubriéndole las espaldas.
Evolucionar o morir.
—Tsch —chasqueó la lengua, irritado. Había una parte irracional de él que seguía cagándose en su propia madre por no recoger el guante y hacer lo que siempre solía hacer: actuar sin pensar—. Una última cosa —dijo, acordándsoe—. Y no, estate tranquila, no diré nada. Y vosotros… Mirad no sé si sois la típica pareja que se tiene que decir te quiero cien veces antes de acostarse. Sea como sea, nada de darse cariñitos a través del sello, ¿eh? O de usarlo para avisarse que tenéis la casa libre. Esto es para urgencias de verdad. Un encuentro con un General… o un encuentro con un General. —Y no había más. Cualquier otra chorrada, que se la ahorrasen, o juraba quitarles el sello al próximo encuentro.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado