26/04/2019, 13:55
(Última modificación: 26/04/2019, 13:58 por Uchiha Akame. Editado 1 vez en total.)
—Puto... Puto... ¡NO! ¿¡QUÉ HACES, HIJO DE PUTA!? —bramó el Uchiha cuando Kaido sacó aquella bolsita de omoide y empezó a vaciarla sobre la tierra húmeda del bosque. Sus ojos, como dos piedras de ébano, estaban a punto de salírsele de las cuencas—. ¡Kaido eres una puta mierda, cabrón sin escrúpulos, no tienes corazón! ¡NO JODER, NO LA TIRES! ¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!
Como un bebote de teta, Akame se revolvió poseído por los febriles delirios del síndrome de abstinencia del omoide, tratando de soltarse de las ataduras. De conseguirlo probablemente hubiera atacado al Tiburón, enrabietado. Coño, incluso podría haber matado a un niño con tal de conseguir otra dosis; estaba en el pico de la abstinencia. Era crucial no ceder.
—Kaido... Mi camarada... Mi compañero... Mi amigo —le llamó el Uchiha luego de serenarse—. Y... Ya estoy b... Bien, de verdad. ¡Ya ha pasado! ¿Qué tal si me sueltas, eh? P... P... Podemos volver a ser amigos, t... te lo juro.
No hacía falta ser un genio para saber que Akame mentía. Siempre se le había dado fatal, y aquel momento no era una excepción. La magia azul hablaba por él.
Como un bebote de teta, Akame se revolvió poseído por los febriles delirios del síndrome de abstinencia del omoide, tratando de soltarse de las ataduras. De conseguirlo probablemente hubiera atacado al Tiburón, enrabietado. Coño, incluso podría haber matado a un niño con tal de conseguir otra dosis; estaba en el pico de la abstinencia. Era crucial no ceder.
—Kaido... Mi camarada... Mi compañero... Mi amigo —le llamó el Uchiha luego de serenarse—. Y... Ya estoy b... Bien, de verdad. ¡Ya ha pasado! ¿Qué tal si me sueltas, eh? P... P... Podemos volver a ser amigos, t... te lo juro.
No hacía falta ser un genio para saber que Akame mentía. Siempre se le había dado fatal, y aquel momento no era una excepción. La magia azul hablaba por él.