7/05/2019, 20:46
Datsue había tenido muchísimos enfrentamientos dialécticos a lo largo de su vida. Se había encontrado con gente tozuda, o con las ideas muy claras, o con fuertes prejuicios contra lo que exponía. Le hubiese gustado decir que, aún así, su labia siempre se había impuesto, logrando vencerles, convencerles de lo muy equivocados que estaban.
Por supuesto, no era verdad. Había saboreado la derrota en muchas ocasiones. Pero lo que sí que era cierto, o al menos así lo recordaba, era que siempre había logrado hacerles tambalear en algún punto. Siempre hallaba un pequeño resquicio, algún argumento en el que tuviesen que ceder, aunque solo fuese en algo colateral.
No con Reiji. Reiji era como un acantilado. No importaba lo que le echases encima, no importaba que el mismísimo mar embravecido se volcase en él, que no se iba a mover. Tenía las ideas claras, inamovibles e inquebrantables.
Suspiró.
—Sigo pensando que te infravaloras, y especialmente que sobrevaloras la fuerza. Lo poderoso que es un ninja no es tan importante, Reiji. Todos pueden hacer la diferencia. Todos. ¿Te crees que yo era más fuerte que Uzumaki Zoku cuando le maté? —rio—. Me llega a pillar a Akame y a mí en un duelo directo y nos come como quiere. Nos cepilla en medio minuto. Pero le pillamos a contrapié, de sorpresa, y solo así logramos vencerle.
»El poder, compañero, no es ni mucho menos tan determinante. Y una de tus katanas corta igual la carne de un cerdo que la de un mismísimo Kage. Pero —levantó las manos, en señal de tregua—, se ve que lo tienes claro. No insistiré en el tema.
Por supuesto, no era verdad. Había saboreado la derrota en muchas ocasiones. Pero lo que sí que era cierto, o al menos así lo recordaba, era que siempre había logrado hacerles tambalear en algún punto. Siempre hallaba un pequeño resquicio, algún argumento en el que tuviesen que ceder, aunque solo fuese en algo colateral.
No con Reiji. Reiji era como un acantilado. No importaba lo que le echases encima, no importaba que el mismísimo mar embravecido se volcase en él, que no se iba a mover. Tenía las ideas claras, inamovibles e inquebrantables.
Suspiró.
—Sigo pensando que te infravaloras, y especialmente que sobrevaloras la fuerza. Lo poderoso que es un ninja no es tan importante, Reiji. Todos pueden hacer la diferencia. Todos. ¿Te crees que yo era más fuerte que Uzumaki Zoku cuando le maté? —rio—. Me llega a pillar a Akame y a mí en un duelo directo y nos come como quiere. Nos cepilla en medio minuto. Pero le pillamos a contrapié, de sorpresa, y solo así logramos vencerle.
»El poder, compañero, no es ni mucho menos tan determinante. Y una de tus katanas corta igual la carne de un cerdo que la de un mismísimo Kage. Pero —levantó las manos, en señal de tregua—, se ve que lo tienes claro. No insistiré en el tema.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado