19/05/2019, 22:28
A pesar de tener una experiencia mayor como shinobi, o eso aparentaba, Ayame humildemente pedía ser tratada como un igual. Eso era algo que alivio en el fondo a el pelirrubio, hacer la actividad que fuese con alguien que derrochaba delirios de grandeza o superioridad no era una de sus tareas preferidas. El niño tendió el brazo derecho en direccion a la kunoichi que le ayudo a levantarse, una vez ya parado Samidare se sacudiría un poco la ropa, antes de reparar en los detalles de la misión que su compañera había agregado.
- A todo esto sen...digo Ayame, no crees que pueda haber algo ahí abajo ¿cierto? - Menciono con un poco de asco notable en su rostro, no el problema del senju no era si se trataba de una banda delictiva, o lo que fuese, sino si hubiera la presencia de algo asqueroso y repugnante de lo que se tuvieran que hacer cargo, después de todo no dejaba de ser un niño, incluso adultos tendrían esa misma preocupación asi que nadie lo podría culpar.
Una vez que se pusieron en marcha a la ubicación que anteriormente marco la kunoichi, paso un tiempo hasta que la ultima le pregunto al senju sobre la fecha de su graduación, de hecho no creo que diese demasiada seguridad decir la verdad en esa situacion pero tampoco es como si pudiese mentir demasiado, su apariencia lo delataba. -Emmm...principios de este año.- En esa instancia al terminar de decir esas palabras el rubio no sabia que reacción esperar de su compañera, en especial habiendo dicho lo anterior, y teniendo las pintas de un niño, lo cual ciertamente era, pero que en un mundo como el shinobi era motivo mas que suficiente para ser subestimado.
- A todo esto sen...digo Ayame, no crees que pueda haber algo ahí abajo ¿cierto? - Menciono con un poco de asco notable en su rostro, no el problema del senju no era si se trataba de una banda delictiva, o lo que fuese, sino si hubiera la presencia de algo asqueroso y repugnante de lo que se tuvieran que hacer cargo, después de todo no dejaba de ser un niño, incluso adultos tendrían esa misma preocupación asi que nadie lo podría culpar.
Una vez que se pusieron en marcha a la ubicación que anteriormente marco la kunoichi, paso un tiempo hasta que la ultima le pregunto al senju sobre la fecha de su graduación, de hecho no creo que diese demasiada seguridad decir la verdad en esa situacion pero tampoco es como si pudiese mentir demasiado, su apariencia lo delataba. -Emmm...principios de este año.- En esa instancia al terminar de decir esas palabras el rubio no sabia que reacción esperar de su compañera, en especial habiendo dicho lo anterior, y teniendo las pintas de un niño, lo cual ciertamente era, pero que en un mundo como el shinobi era motivo mas que suficiente para ser subestimado.