23/05/2019, 17:30
—Está bien, Shikari, está bien.
Akame apuró el cigarrillo y tiró la colilla por la ventana del camarote, tal y como había hecho el día anterior. También se aseguró de que estaba perfectamente cerrada. Luego se colocó el kasa en la cabeza, se ajustó el yukata —que estaba ligeramente arrugado— y colocó la silla en su sitio. Luego le dedicó una última mirada a la prostituta antes de salir de allí.
—Ahora duerme, Shikari. Nos veremos a la hora del almuerzo.
El Uchiha formó el sello de clonación y dejó un Kage Bunshin allí; seguía sin fiarse de la prostituta. Tomó el plato con los restos del desayuno y le dejó la botella de agua, destapada, junto a la cama. Luego, salió del camarote, de vuelta al comedor, para dejar allí la vajilla sucia.
Akame apuró el cigarrillo y tiró la colilla por la ventana del camarote, tal y como había hecho el día anterior. También se aseguró de que estaba perfectamente cerrada. Luego se colocó el kasa en la cabeza, se ajustó el yukata —que estaba ligeramente arrugado— y colocó la silla en su sitio. Luego le dedicó una última mirada a la prostituta antes de salir de allí.
—Ahora duerme, Shikari. Nos veremos a la hora del almuerzo.
El Uchiha formó el sello de clonación y dejó un Kage Bunshin allí; seguía sin fiarse de la prostituta. Tomó el plato con los restos del desayuno y le dejó la botella de agua, destapada, junto a la cama. Luego, salió del camarote, de vuelta al comedor, para dejar allí la vajilla sucia.