25/10/2019, 18:47
Las palabras son como el mejor ninjutsu de transformación. A veces las palabras podían cortar con la forma de la mejor espada, otras, atravesar tu pecho como la estaca que busca terminar con la vida de un vampiro. También como el martillo que golpe tu cabeza para destrozar el craneo.
Pero las palabras no solo pueden adoptar la forma de un arma. Las palabras pueden se la pasión del beso de un amante, pueden ser como la lágrima que resbala por la mejilla de un niño, como el puño que golpea una pared de piedra, frustrado.
Las palabras podían serlo todo, y no ser nada. Pero en esa ocasión, las palabras de katsudon fueron como el abrazo de un padre o una madre.
—¡Vamos, hombre! ¿Cómo vas a decir eso? ¡Si eres todo un buen zagal! ¿Y lo ameno que nos has hecho el viaje en barco? ¡Venga, Reiji-kun! ¡A mi me has caído genial!
Y aún así, la realidad era la realidad. Por mucha arena que le echarás por encima, por muy profundo que la enterarás, siempre estaría ahí.
Un par de días en un barco no podían borrar él pasado. Y pese a la calidez de sus palabras, y del repentino "abrazo" de Katsudon, solo supe contestarle mirándole y sonriendo, con una sonrisa que, tal vez, no fuese del todo sincera.
—Eres amable y buena persona —Sus palabras sonaron mas frias, pero no menos sinceras. —, y eso es más de lo que muchos pueden presumir ser.
Quizás se debía, mas bien, a que todas las muestras de amistad y cariño que conocía provenían de mi familia, y la única persona a la que había podido llamar amiga alguna vez, era Sakura.
Ya no. Pero tal vez por eso no sabia cómo reaccionar o sentirme en aquel momento. Y lo mas probable es que también fuese el motivo de que, a pesar de todo, mis siguientes palabras sonaran tan frías como el hielo que cubría las montañas y bosques de aquel pais.
—Lo mejor sería que nos diesemos prisa, cumplieramos nuestro cometido y regresáramos a Uzushiogakure.
En realidad quería que aquellas palabras sonarán de otra manera. En mi cabeza pensaba que lo mejor era que molestaramos lo menos posible a aquella gente. Como había dicho Yunna, suficiente habían tenido con la muerte de su líder a manos de un usuario de ninjutsu.
Y si nuestra presencia les desagradaba y les hacia sentir incomodos, lo mejor es que estuviéramos allí el menor tiempo posible. Más por ellos que por nosotros.
Pero las palabras no solo pueden adoptar la forma de un arma. Las palabras pueden se la pasión del beso de un amante, pueden ser como la lágrima que resbala por la mejilla de un niño, como el puño que golpea una pared de piedra, frustrado.
Las palabras podían serlo todo, y no ser nada. Pero en esa ocasión, las palabras de katsudon fueron como el abrazo de un padre o una madre.
—¡Vamos, hombre! ¿Cómo vas a decir eso? ¡Si eres todo un buen zagal! ¿Y lo ameno que nos has hecho el viaje en barco? ¡Venga, Reiji-kun! ¡A mi me has caído genial!
Y aún así, la realidad era la realidad. Por mucha arena que le echarás por encima, por muy profundo que la enterarás, siempre estaría ahí.
Un par de días en un barco no podían borrar él pasado. Y pese a la calidez de sus palabras, y del repentino "abrazo" de Katsudon, solo supe contestarle mirándole y sonriendo, con una sonrisa que, tal vez, no fuese del todo sincera.
—Eres amable y buena persona —Sus palabras sonaron mas frias, pero no menos sinceras. —, y eso es más de lo que muchos pueden presumir ser.
Quizás se debía, mas bien, a que todas las muestras de amistad y cariño que conocía provenían de mi familia, y la única persona a la que había podido llamar amiga alguna vez, era Sakura.
Ya no. Pero tal vez por eso no sabia cómo reaccionar o sentirme en aquel momento. Y lo mas probable es que también fuese el motivo de que, a pesar de todo, mis siguientes palabras sonaran tan frías como el hielo que cubría las montañas y bosques de aquel pais.
—Lo mejor sería que nos diesemos prisa, cumplieramos nuestro cometido y regresáramos a Uzushiogakure.
En realidad quería que aquellas palabras sonarán de otra manera. En mi cabeza pensaba que lo mejor era que molestaramos lo menos posible a aquella gente. Como había dicho Yunna, suficiente habían tenido con la muerte de su líder a manos de un usuario de ninjutsu.
Y si nuestra presencia les desagradaba y les hacia sentir incomodos, lo mejor es que estuviéramos allí el menor tiempo posible. Más por ellos que por nosotros.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)