12/01/2020, 13:53
La chica de la pastelería gritó indignada al extraño hombre que acompañaba a los dos algo sobre el control y las invocaciones. «De modo que el cerdo es una invocación de ese tipo...» Daruu volvió a centrar toda su atención en el animal, quien una vez más volvió a enorgullecerse de su supuesto renombre como cerdo de buen postín.
Pero hacía falta ser un lince para ver que el "Gran" Ōshishi estaba en desventaja. «Creo que hasta él se ha dado cuenta.»
Daruu había gastado mucho chakra. Ya no estaba solo, y leía las dudas en el jabalí. Desactivó su dōjutsu y guardó su espada. Se cruzó de brazos.
—No haces más que presumir de grandeza —le espetó—. Dime, ¿conoces a Amekoro Yui, cerdo? ¿Tienes idea de lo disgustada que va a estar cuando vea este desastre? ¿Tienes idea de lo que podría hacerte?
»Serás el plato principal de su cena, puerco —espetó, mordaz, y mostró la mejor de sus sonrisas de amejin.
Pero hacía falta ser un lince para ver que el "Gran" Ōshishi estaba en desventaja. «Creo que hasta él se ha dado cuenta.»
Daruu había gastado mucho chakra. Ya no estaba solo, y leía las dudas en el jabalí. Desactivó su dōjutsu y guardó su espada. Se cruzó de brazos.
—No haces más que presumir de grandeza —le espetó—. Dime, ¿conoces a Amekoro Yui, cerdo? ¿Tienes idea de lo disgustada que va a estar cuando vea este desastre? ¿Tienes idea de lo que podría hacerte?
»Serás el plato principal de su cena, puerco —espetó, mordaz, y mostró la mejor de sus sonrisas de amejin.