30/01/2020, 12:35
— ¿Un shinobi? ¿De Uzu? — respondió extrañada con las manos en alto, pese a que estaban a distancia y su arma era cuerpo a cuerpo, hasta ella comprendía que estaba en una situación delicada y más aún tan lejos de casa — Pero si llevas hasta un daisho, coleta, y cualquiera diría por tu ropa que eres de alguna escuela.
Ladeo la cabeza de arriba abajo, como quien inspeccionaba una columna antigua pero manteniendo la distancia por si esta se le venía encima, solo que en su lugar podría llegar a ser un buen tajo. En las historias, mangas y series que ella devoraba sobretodo las que trataban sobre algún estilo de combate, relataban y mostraban las mismas ropas que portaba él, por lo que todavía no se daba por convencida.
— Oye que si es algo personal. Lo entiendo, pero no tienes que ocultármelo a mí. Seré como una tumba. — añadió convencida aún de que era un espadachín. — Quiero decir, estáis aislados del resto del mundo en el País del hierro. ¿No? ¿Que haces tan lejos?
Los brazos empezaban a temblarle ligeramente de mantenerlos en alto tanto rato.
Ladeo la cabeza de arriba abajo, como quien inspeccionaba una columna antigua pero manteniendo la distancia por si esta se le venía encima, solo que en su lugar podría llegar a ser un buen tajo. En las historias, mangas y series que ella devoraba sobretodo las que trataban sobre algún estilo de combate, relataban y mostraban las mismas ropas que portaba él, por lo que todavía no se daba por convencida.
— Oye que si es algo personal. Lo entiendo, pero no tienes que ocultármelo a mí. Seré como una tumba. — añadió convencida aún de que era un espadachín. — Quiero decir, estáis aislados del resto del mundo en el País del hierro. ¿No? ¿Que haces tan lejos?
Los brazos empezaban a temblarle ligeramente de mantenerlos en alto tanto rato.