30/01/2020, 14:49
Nanashi dio un largo suspiro; había dejado años atrás su servicio como ninja, pero estaba al corriente de todo lo que pasaba. Las palabras de Hana tuvieron un gran peso sobre él, no quería volver a empuñar una espada y menos con fines bélicos donde nadie acabaría siendo un claro ganador.
— Esperemos que vuelva esa paz y calma. Esperemos que nadie cometa ninguna estupidez. — dijo casi entre susurros; se removió un poco el sombrero encima de él, con el fin de tapar un rayo de sol molesto.
— Espero que esa paz sea para todas las villas y que la próxima vez que nos veamos sea con ambas bandanas por delante.
Algo apenada, Ren se llevó una mano al interior del grueso uwagi oscuro, sacando su bandana lentamente. Se la anudó alrededor del cuello, como hacía habitualmente todas las mañanas.
— Nada me gustaría más. — respondió.
— Esperemos que vuelva esa paz y calma. Esperemos que nadie cometa ninguna estupidez. — dijo casi entre susurros; se removió un poco el sombrero encima de él, con el fin de tapar un rayo de sol molesto.
— Espero que esa paz sea para todas las villas y que la próxima vez que nos veamos sea con ambas bandanas por delante.
Algo apenada, Ren se llevó una mano al interior del grueso uwagi oscuro, sacando su bandana lentamente. Se la anudó alrededor del cuello, como hacía habitualmente todas las mañanas.
— Nada me gustaría más. — respondió.