1/02/2020, 15:22
—Ostia puta, Akame —porque: ¿qué puedes decir cuando te enteras de algo así? pues un improperio, desde luego. El más sucio que pudiera salir de su boca.
El escualo de pronto recordó todas las ocasiones en las que llegó a interactuar con Uchiha Akame, tanto en la Isla Maldita como en su combate en el torneo, o en la emboscada que le hicieron a Datsue; y aún seguía sin poder haberse dado cuenta de que él era uno de los Hermanos del Desierto. El profesional nunca hubiese hecho algo para desvelar semejante secreto, dado el secretismo que fungía sobre el tema en aquél entonces donde las relaciones políticas estaban quebradas. Pero, hoy por hoy, con la Alianza, el gyojin podía imaginar que el asunto no debía ser tan tabú como antes, y que ahora mismo podía restarle bastante importancia al hecho de que Akame hubiese sido, en vida pasada, un jodido jinchūriki.
—¿Quién es el otro? —preguntó, aunque ya podía imaginárselo.
El escualo de pronto recordó todas las ocasiones en las que llegó a interactuar con Uchiha Akame, tanto en la Isla Maldita como en su combate en el torneo, o en la emboscada que le hicieron a Datsue; y aún seguía sin poder haberse dado cuenta de que él era uno de los Hermanos del Desierto. El profesional nunca hubiese hecho algo para desvelar semejante secreto, dado el secretismo que fungía sobre el tema en aquél entonces donde las relaciones políticas estaban quebradas. Pero, hoy por hoy, con la Alianza, el gyojin podía imaginar que el asunto no debía ser tan tabú como antes, y que ahora mismo podía restarle bastante importancia al hecho de que Akame hubiese sido, en vida pasada, un jodido jinchūriki.
—¿Quién es el otro? —preguntó, aunque ya podía imaginárselo.