10/02/2020, 13:09
— Se llama Inuzuka Nabi, y tiene un perro llamado Stuffy. Son unos loquillos, pero buenos tipos.
— ¿Cómo que tiene un perro? — cada vez todo le daba más vueltas, había tantos caminos que tomar y su curiosidad le decía que los cogiese todos a la vez. — ¿Y qué raza es? ¿También un Shiba Inu?
Ignoró sutilmente la parte en la que le hablaba de la relación entre Nabi y Eri, si seguía por ahí se indignaría con su sensei por no haber tenido con ella una conversación de chicas. Vale que había una diferencia abismal de rango entre ellas, pero eso era otra cosa, era salseo romántico. ¡Debía preguntarle en cuanto la viese! Una historia de amor, tan cerca y tan lejos de su alcance.
— ¿Y tú, Datsue-san? ¿Tienes novia? — hizo una breve pausa — O novio...
No se lo había planteado hasta que se lo planteó. Era la forma perfecta de cotillear y no parecer que estaba coqueteando.
— ¿Cómo que tiene un perro? — cada vez todo le daba más vueltas, había tantos caminos que tomar y su curiosidad le decía que los cogiese todos a la vez. — ¿Y qué raza es? ¿También un Shiba Inu?
Ignoró sutilmente la parte en la que le hablaba de la relación entre Nabi y Eri, si seguía por ahí se indignaría con su sensei por no haber tenido con ella una conversación de chicas. Vale que había una diferencia abismal de rango entre ellas, pero eso era otra cosa, era salseo romántico. ¡Debía preguntarle en cuanto la viese! Una historia de amor, tan cerca y tan lejos de su alcance.
— ¿Y tú, Datsue-san? ¿Tienes novia? — hizo una breve pausa — O novio...
No se lo había planteado hasta que se lo planteó. Era la forma perfecta de cotillear y no parecer que estaba coqueteando.