13/02/2020, 13:41
— ¿¡Hana!? ¿Que te ha ocurrido?
La joven kunoichi se quedó a cuadros cuando su salvadora resultó ser Himura Ren. Por un largo momento se quedó con la boca entreabierta mirando a la muchacha. Tenía algunos cortecitos en el rostro, fruto de la prisa que se había dado por alcanzarla.
— Ren... Yo... — se sonrojó terriblemente — Me he caído de un árbol, justo en este matojo de plantas asesinas y creo que me he hecho un esguince. Cuando he intentado salir, se me había enredado la pierna buena y mi Kodachi no estaba. Está por ahí y, bueno, no podía moverme para cogerla. — señaló detrás de la chica, sobresaliendo de otro cúmulo de plantas estaba la katana, envainada.
¿Por qué? ¿Por qué la había encontrado la última persona que quería que viese su lado más torpe y estúpido? Ahora Ren tendría la prueba tácita de que Hana era la peor kunoichi que había pisado Onindo. Pidiendo ayuda por unas estúpidas zarzas. No pudo volver a mirarla a los ojos y la sangre acumulada en sus mejillas no se movía de allí.
La joven kunoichi se quedó a cuadros cuando su salvadora resultó ser Himura Ren. Por un largo momento se quedó con la boca entreabierta mirando a la muchacha. Tenía algunos cortecitos en el rostro, fruto de la prisa que se había dado por alcanzarla.
— Ren... Yo... — se sonrojó terriblemente — Me he caído de un árbol, justo en este matojo de plantas asesinas y creo que me he hecho un esguince. Cuando he intentado salir, se me había enredado la pierna buena y mi Kodachi no estaba. Está por ahí y, bueno, no podía moverme para cogerla. — señaló detrás de la chica, sobresaliendo de otro cúmulo de plantas estaba la katana, envainada.
¿Por qué? ¿Por qué la había encontrado la última persona que quería que viese su lado más torpe y estúpido? Ahora Ren tendría la prueba tácita de que Hana era la peor kunoichi que había pisado Onindo. Pidiendo ayuda por unas estúpidas zarzas. No pudo volver a mirarla a los ojos y la sangre acumulada en sus mejillas no se movía de allí.