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Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
#46
Kakita Bendō se mantenía impretérrito ante lo que parecía ser, a todas luces, un fracaso anunciado de su operación. Pese a que intentaba unir los hilos, a Akame todavía le faltaban datos, datos, datos... ¿Cómo podía ser? Suponer que todo se trataba de una simple coincidencia era demasiado ingenuo para un ninja veterano como él, ¿pero entonces? ¿Acaso les habían pillado por sus identidades falsas, y Kyūtsuki no había hecho en realidad tan buen trabajo? «No, no puede ser... No se habrían llevado a ese tipo entonces. Nos tendrían a nosotros cuatro desde el primer momento», razonó el Uchiha. Sin embargo, había algo que se le seguía escapando.

De repente vio movimiento junto a la caseta: el guardia acababa de indicar algo. "Dos", decía. «El "dos" lo tengo claro, quiere que estos cabrones se lleven a dos personas más, ¿pero el "uno" del principio? Debe ser algún tipo de código...» No tenían mucho tiempo para pensar, y aquella necesidad de urgencia se hizo todavía más evidente cuando la que parecía ser la jefa de aquellos "Protectores del Muelle" ordenó que esposaran a Kaido. «Si esa mierda son esposas supresoras, todo el tinglado se nos va a ir al diablo ahora mismo.» Cabía la posibilidad de que fuesen grilletes normales, pero, ¿iba a arriesgarse Uchiha Akame el Profesional a eso?

No, claro que no. Un Profesional nunca jugaba al azar.

«Tres enemigos. Los dos Protectores del Muelle y el guardia de la caseta. Tengo que hacerlo ya.»

¡Ñieeeeeeeeeeeeeeeeeck!

Kakita Bendō dejó escapar un chillido como el de una rata a la que le hubieran pisado la cola. Luego se encogió sobre sí mismo, bajo el amplio kasa de paja, y trató de revolverse como si le doliera muchísimo la tripa. Incluso se tiró al suelo, buscando armar una escena lo suficientemente inesperada como para atraer la atención de los dos Protectores. Sus manos se movían por su tripa, haciendo aspavientos, pero desde debajo del kasa el muchacho mantenía la mirada fija en los pies de la que parecía a cargo del retén. Si conseguía que se acercara a él lo suficiente, pondría en marcha su improvisado plan, tumbándose del lado contrario al que estaba el llamado Higari y el guardia de la caseta.

¡Me duele, me duele! —gimoteaba—. ¡Señorita, me duele mucho aquí!

Con la mano izquierda metida dentro de los ropajes de su uwagi y contorsionada en el sello del Carnero, con el índice diestro se señalaba la tripa y la cabeza gacha, sus ojos ahora teñidos del color de la sangre ocultos bajo el amplio kasa de paja. Y, si la Protectora del Muelle corría la mala suerte de mirarlo, aunque sólo fuese un instante...

«Escucharía primero un sonido; suave, amortiguado por la habilidad de un ninja entrenado, pero claro a sus oídos. El sonido de múltiples pasos que bordeaban el retén, entre la niebla, buscando cruzar la imaginaria línea que les separaba. Eran pasos, sin duda, rápidos y precisos que se dirigían a la capital. No se distinguía en ellos la torpeza al andar de un civil o un soldado, ni iban acompañados del tintinear metálico de las armas. Eran pasos de shinobi.

¡Un momento! Fue sólo un momento, pero creyó ver por el rabillo del ojo varias sombras, entre la niebla, que rebasaban su posición aprovechando ¿tal vez? que ella estaba concentrada en los viajeros que intentaban cruzar el retén.»

Entonces la ilusión cesó. Y Akame dejó que las incógnitas y la paranoia de la seguridad que parecía haber invadido aquellas tierras, hicieran el resto.


¤ Saimingan
¤ Ojo Hipnótico
- Tipo: Apoyo (Genjutsu visual)
- Rango: A
- Requisitos: Uchiha 60
- Gastos: 18 CK, impide regen. de chakra
- Daños: -
- Efectos adicionales: Distracción, control, ataque sorpresa, engaño
- Carga: 4
- Velocidad: Muy rápida
- Alcance y dimensiones: -
Mediante su Sharingan, el usuario es capaz de hacer entrar en un Genjutsu a su oponente con mero contacto visual. Cuando el oponente entre en su ilusión, podrá mostrarle lo que desee, emulando visión, sonido, e incluso sensaciones como el dolor o el placer. Mientras se realiza el Genjutsu, el usuario no puede atacar a la victima, pues cualquier daño externo anularía el engaño, y durante el transcurso del mismo, tanto usuario como oponente estarán paralizados en el sitio. El ejecutor será capaz de modificar el entorno por completo durante el transcurso de la ilusión, y de hacer que la ilusión dure todo el tiempo que haga falta, hasta un máximo de diez turnos. Si dispone de menos de 40 de Inteligencia, no será capaz de mantener ninguna técnica activa mientras la utiliza. No se puede utilizar junto a jutsus complejos y que requieran un excesivo control, como criaturas dirigibles o clones de cualquier tipo.

(Uchiha 70) Por 32 CK adicionales al gasto base, si la Inteligencia del usuario es mayor que la Voluntad del oponente en más de 30 puntos o en más de 10 si el PV del oponente ha descendido por debajo de su 60%, si la víctima está completamente inmovilizada, o si se trata de un civil, el usuario puede utilizar la técnica para crear un estado de sueño profundo mediante hipnosis. Luego podrá interrogar al afectado libremente si así lo desea o dejarlo caer inconsciente. Si sufre daños, o pasan tres turnos, despertará. Mediante este uso de la técnica también se puede inducir una parálisis en lugar de un sueño profundo.

¤ Utakata
¤ Efímero
- Tipo: Apoyo (Genjutsu visual)
- Rango: A
- Requisitos: Uchiha 80, Saimingan
- Gastos: Saimingan + 18 CK
- Daños: -
- Efectos adicionales: Redirige el Genjutsu del Sharingan a un dedo de la mano
- Sellos: Carnero (una mano)
- Velocidad: Instantánea
- Alcance y dimensiones: -
El usuario utiliza una treta para inducir al oponente en la hipnosis del Saimingan utilizando para ello otra parte del cuerpo, de manera que, mientras éste intenta no mirarle a los ojos, cae sin remedio en la misma ilusión que está intentando evitar desviando la mirada.
Diálogo - «Pensamiento» - Narración

Mangekyō utilizado por última vez: Flama, Verano de 220

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Mensajes en este tema
RE: Lo que se esconde tras la niebla - por Uchiha Akame - 17/02/2020, 15:42


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