3/03/2020, 10:40
Cuando estuvo apunto de atragantarse, Ren soltó un bufido al verla en esa situación; siempre transmitía una suave y dulce sensación de delicadeza y cuidado, por lo que aquella situación era de lo más cómica. Tal vez estaba empezando a pegarse parte de la rudeza de la morena. Tras ello, comenzó a acribillarla a preguntas sin ton ni son; no era algo que no pudiera contar ¿o si? No estaba del todo segura y se podía ver en su rostro, pero Hana comenzaba a ser alguien de confianza para ella, por lo que no pudo negarse.
—P-Pues... A ver... Fui a comprar unos pasteles a una tienda local, Ayame y Daruu estaban a cargo. — hizo una pausa para comer, que le ayudo para hacer algo más de memoria. — Oh si, Daruu era jounin; y bueno mientras esperaba, unos pequeños jabalís entraron en el local y destrozaron todo. Los perseguimos por las calles para evitar que alguien saliera dañado.
—P-Pues... A ver... Fui a comprar unos pasteles a una tienda local, Ayame y Daruu estaban a cargo. — hizo una pausa para comer, que le ayudo para hacer algo más de memoria. — Oh si, Daruu era jounin; y bueno mientras esperaba, unos pequeños jabalís entraron en el local y destrozaron todo. Los perseguimos por las calles para evitar que alguien saliera dañado.