9/03/2020, 22:25
— Está aquí. No te preocupes
Para cuando dijo eso, Hana ya estaba en frente de ella, sentada en la cama, aún con los ojos rojos y humedos pero algo más aliviada. Cogió ambas manos de Ren con las suyas, al mismo tiempo que sujetaban el barreño.
— Gracias, Ren-chan. — sonrió, mientras las dos últimas lágrimas abandonaban sus ojos. — Lo cierto es que quería el panda porque tarde o temprano nos separaremos y quería tener algo digno de ti para recordarte, y Ren-chan peludita era lo mejor del mundo para ello, casi como una señal del destino. Pero... no he sido capaz de conseguirlo y... me ha sentado muy mal. No quiero estar sola. — el tono y su mirada fueron bajando a medida que hablaba, hasta que su voz no fue más que un susurro y su cabeza estaba gacha, con la mirada clavada sus manos.
Para cuando dijo eso, Hana ya estaba en frente de ella, sentada en la cama, aún con los ojos rojos y humedos pero algo más aliviada. Cogió ambas manos de Ren con las suyas, al mismo tiempo que sujetaban el barreño.
— Gracias, Ren-chan. — sonrió, mientras las dos últimas lágrimas abandonaban sus ojos. — Lo cierto es que quería el panda porque tarde o temprano nos separaremos y quería tener algo digno de ti para recordarte, y Ren-chan peludita era lo mejor del mundo para ello, casi como una señal del destino. Pero... no he sido capaz de conseguirlo y... me ha sentado muy mal. No quiero estar sola. — el tono y su mirada fueron bajando a medida que hablaba, hasta que su voz no fue más que un susurro y su cabeza estaba gacha, con la mirada clavada sus manos.