12/03/2020, 20:16
(Última modificación: 12/03/2020, 20:16 por Himura Hana.)
Todos se quedaron parados, mirando al suelo, hasta que la voz de Eri inundó el ambiente, tras cantar su linea, Hana la relevó, cantando la suya propia. Ambas se movían al unísono, al mismo tiempo que sus compañeros que solo apoyaban su baile desde atrás.
Entonces llegó la parte del solo de la Uzumaki, que dio un paso adelante y empezó a cantar y desmelenarse como Hana nunca pensó que fuese capaz, con lo seria y calmada que era. Mientras la pelirroja cantaba, los otros tres bailaban por detrás de ella siguiendo la coreografía. Ichiro, con una precisión milimétrica, digna de un cirujano, Jiro, al igual que Hana, con algo más de energía, acabando los pasos y los gestos con emoción muchas veces.
Eri acabó su estrofa y se retiró sutilmente al mismo tiempo que Hana daba un paso al frente, empezando su parte sin dejar de mover el cuerpo, Jiro, como su sombra, estaba dos pasos tras ella imitando su baile, igual que Ichiro con Eri.
Ahora venía la parte en que cantaban ambas otra vez, una al lado de la otra, sincronizando su baile. También era la parte más movidita, un saltito por aquí, movimiento de caderas, movimientos de manos y todo sin parar un solo momento de cantar.
Entonces llegó la parte del solo de la Uzumaki, que dio un paso adelante y empezó a cantar y desmelenarse como Hana nunca pensó que fuese capaz, con lo seria y calmada que era. Mientras la pelirroja cantaba, los otros tres bailaban por detrás de ella siguiendo la coreografía. Ichiro, con una precisión milimétrica, digna de un cirujano, Jiro, al igual que Hana, con algo más de energía, acabando los pasos y los gestos con emoción muchas veces.
Eri acabó su estrofa y se retiró sutilmente al mismo tiempo que Hana daba un paso al frente, empezando su parte sin dejar de mover el cuerpo, Jiro, como su sombra, estaba dos pasos tras ella imitando su baile, igual que Ichiro con Eri.
Los milagros no son una coincidencia
Son cristales hechos con nuestro esfuerzo
No importa en que tipo de oscuridad este
Existen sueños hermosos
Son cristales hechos con nuestro esfuerzo
No importa en que tipo de oscuridad este
Existen sueños hermosos
Ahora venía la parte en que cantaban ambas otra vez, una al lado de la otra, sincronizando su baile. También era la parte más movidita, un saltito por aquí, movimiento de caderas, movimientos de manos y todo sin parar un solo momento de cantar.