14/03/2020, 16:38
Si se quedaba de brazos cruzados, Kisame sería violentamente dañado y poco después ella seria la siguiente. Una vez ya en pie, se llevo una mano al costado mientras con la otra sostenía su arma de madera. ¿Y después de ellos? La aldea entera seguramente, y todavía quedaba por saber que cojones parecía ocultar aquel pastor.
— ¡Me cago en todo, joder! — agarró el bokken con ambas manos, y comenzó la carrera contra aquella bestia, buscando golpear el cuello para evitar que Kisame saliera dañado.
«Si quiere una distracción puedo volver a usar el Iaido: Nikko; puede que funcione una segunda vez, pero dudo que una tercera. » pensó tras lanzarse de cabeza a golpearlo.
— ¡Me cago en todo, joder! — agarró el bokken con ambas manos, y comenzó la carrera contra aquella bestia, buscando golpear el cuello para evitar que Kisame saliera dañado.
«Si quiere una distracción puedo volver a usar el Iaido: Nikko; puede que funcione una segunda vez, pero dudo que una tercera. » pensó tras lanzarse de cabeza a golpearlo.