16/03/2020, 01:44
No pudo evitar soltar una sonrisa apenada, meciendo suavemente la mano de Hana, como si con eso intentara disipar la tristeza de ambas; sin resultado alguno seguramente.
— Bueno... Siempre nos quedara Yukio ¿no? — intensificó un poco más la sonrisa, y luego soltó un pequeño bufido. — El primer día de Entretiempo, nos vemos en la entrada de Yukio ¿Vale? — El tren hizo un último llamamiento a los pasajeros, y Ren lo aprovecho rápidamente para darle un último abrazo y sentir el calor de Hana.
— Te echaré de menos. Cuidate ¿vale? — le susurró al oído, y acto seguido subió con paso ligero al tren.
Se dirgió hasta su asiento con rapidez, para poder dar una última mirada a su hermana de otra villa; con unos ojos azules vidriosos por las lágrimas contenidas.
— Bueno... Siempre nos quedara Yukio ¿no? — intensificó un poco más la sonrisa, y luego soltó un pequeño bufido. — El primer día de Entretiempo, nos vemos en la entrada de Yukio ¿Vale? — El tren hizo un último llamamiento a los pasajeros, y Ren lo aprovecho rápidamente para darle un último abrazo y sentir el calor de Hana.
— Te echaré de menos. Cuidate ¿vale? — le susurró al oído, y acto seguido subió con paso ligero al tren.
Se dirgió hasta su asiento con rapidez, para poder dar una última mirada a su hermana de otra villa; con unos ojos azules vidriosos por las lágrimas contenidas.