9/04/2020, 15:17
—. No, no vengo a entregarte ningún mensaje. Nadie te responsabiliza por lo que pasó, Reiji. Al menos no yo. Tampoco Hanabi
De Datsue, me lo podía esperar. La Morikage le quería ver muerto. Bueno, a el, a Ayame, y a todos los bijuus que existiesen. Pero, podía entender que para él, una baja enemiga era un alivio, aunque fuera un genin, era un problema menos del que preocuparse.
Pero Hanabi... Seguro que la Morikage no se quedaba conforme con un simple "Lo siento, no volverá a suceder". Igual hasta le pedía mi cabeza a Hanabi si el chico se moría, en compensación. De gente de una villa que se metió en un conflicto por que sí, y que ademas quiso aprovechar la confusión para atacar un hospital, no podía esperar nada bueno.
Y todo aquello lo había desencadenado yo. Con un solo golpe.
—Fue un solo golpe, podía haber apuntado al hombro, o a un brazo, le habría herido severamente, pero no le hubiese dejado tan mal... Sin embargo, pensé que atacar a cualquiera de esos puntos significaría dejarle una oportunidad de oro a mi oponente para contraatacar.
Era cierto que yo no quería que el combate hubiese terminado de esa manera, pero seria una gran mentira decir que yo no quería dejarle fuera de combate con ese golpe. Quería. Y aunque me pásese de fuerza ejecutando aquella técnica, cualquier otra cosa era solo una excusa para hacerme sentir mejor a mi mismo, restándole importancia a lo sucedido.
—Habrá consecuencias, eso seguro. Ese chico grito a pleno pulmón que era el aprendiz de Juro, igual lo rematan y me cargan él muerto a mí, o lo que es peor, igual se muere por las secuelas del golpe.
Aunque los Kusajin quisiesen cargarse a Datsue, no era una excusa para matar a uno de ellos en un torneo que se suponía que era para mostrar nuestra fuerza sin aseinarnos unos a otros.
—Espero que tu pelea fuese mucho mejor que la mia...
De Datsue, me lo podía esperar. La Morikage le quería ver muerto. Bueno, a el, a Ayame, y a todos los bijuus que existiesen. Pero, podía entender que para él, una baja enemiga era un alivio, aunque fuera un genin, era un problema menos del que preocuparse.
Pero Hanabi... Seguro que la Morikage no se quedaba conforme con un simple "Lo siento, no volverá a suceder". Igual hasta le pedía mi cabeza a Hanabi si el chico se moría, en compensación. De gente de una villa que se metió en un conflicto por que sí, y que ademas quiso aprovechar la confusión para atacar un hospital, no podía esperar nada bueno.
Y todo aquello lo había desencadenado yo. Con un solo golpe.
—Fue un solo golpe, podía haber apuntado al hombro, o a un brazo, le habría herido severamente, pero no le hubiese dejado tan mal... Sin embargo, pensé que atacar a cualquiera de esos puntos significaría dejarle una oportunidad de oro a mi oponente para contraatacar.
Era cierto que yo no quería que el combate hubiese terminado de esa manera, pero seria una gran mentira decir que yo no quería dejarle fuera de combate con ese golpe. Quería. Y aunque me pásese de fuerza ejecutando aquella técnica, cualquier otra cosa era solo una excusa para hacerme sentir mejor a mi mismo, restándole importancia a lo sucedido.
—Habrá consecuencias, eso seguro. Ese chico grito a pleno pulmón que era el aprendiz de Juro, igual lo rematan y me cargan él muerto a mí, o lo que es peor, igual se muere por las secuelas del golpe.
Aunque los Kusajin quisiesen cargarse a Datsue, no era una excusa para matar a uno de ellos en un torneo que se suponía que era para mostrar nuestra fuerza sin aseinarnos unos a otros.
—Espero que tu pelea fuese mucho mejor que la mia...