30/04/2020, 19:38
Pero Daigo no salió disparado, de hecho, ni siquiera se movió del sitio, pues su puñetazo no solo había conseguido impactar en la bestia, sino que había desviado su ataque hacia el cielo, haciendo que fallara en arrancarle la cabeza por demasiado poco. Eso no le agradó nada al monstruo, así que rápidamente decidió hacer algo al respecto.
El chico alzó ambos brazos para intentar portegerse de la enorme bestia, que herida y acorralada intentó arrancarle el cuello de un mordisco. Habría visto toda su vida pasar frente a sus ojos, de no ser porque el miedo que sentía era tal que no podía mantenerlos abiertos para ver como le arrancaban un brazo, si no es que acababa arrebatándole la vida en su lugar. Quizá las dos cosas.
Abrió los ojos un poco, apenas lo suficiente como para poder ver en primera fila como las fauces del Gebijuu se cernían sobre él. Estaban tan cerca que con solo cerrarse podrían darle fin a Tsukiyama Daigo, que para colmo estaba tan nervioso que ni siquiera podía concentrar chakra en sus brazos para protegerlo.
¿Para protegerlo? Para protegerlo estaba su leal camarada, Inuzuka Etsu, que llegó justo a tiempo para salvar la vida del peliverde, acabando con la de la bestia en el proceso.
El chico cayó sentado, con vida, a la vez que el monstruo hizo exactamente lo mismo en el agujero que el mismo había creado, muerto.
Daigo podría jurar haber visto el momento exacto en el que la vida desapareció de los ojos del animal.
—O-oye. Había escuchado que los Gebijuu desaparecían al morir...
¿Por qué este no lo hacía? ¿Por qué lo seguía mirando?
El chico alzó ambos brazos para intentar portegerse de la enorme bestia, que herida y acorralada intentó arrancarle el cuello de un mordisco. Habría visto toda su vida pasar frente a sus ojos, de no ser porque el miedo que sentía era tal que no podía mantenerlos abiertos para ver como le arrancaban un brazo, si no es que acababa arrebatándole la vida en su lugar. Quizá las dos cosas.
Abrió los ojos un poco, apenas lo suficiente como para poder ver en primera fila como las fauces del Gebijuu se cernían sobre él. Estaban tan cerca que con solo cerrarse podrían darle fin a Tsukiyama Daigo, que para colmo estaba tan nervioso que ni siquiera podía concentrar chakra en sus brazos para protegerlo.
¿Para protegerlo? Para protegerlo estaba su leal camarada, Inuzuka Etsu, que llegó justo a tiempo para salvar la vida del peliverde, acabando con la de la bestia en el proceso.
El chico cayó sentado, con vida, a la vez que el monstruo hizo exactamente lo mismo en el agujero que el mismo había creado, muerto.
Daigo podría jurar haber visto el momento exacto en el que la vida desapareció de los ojos del animal.
—O-oye. Había escuchado que los Gebijuu desaparecían al morir...
¿Por qué este no lo hacía? ¿Por qué lo seguía mirando?
![[Imagen: IMG-20210515-202948-586.png]](https://i.ibb.co/fqtcMG8/IMG-20210515-202948-586.png)
¡Muchas gracias a Nao por el sensual avatar y a Ranko por la pedazo de firma!
Team pescado.