31/05/2020, 09:52
(Última modificación: 31/05/2020, 09:56 por Uchiha Datsue. Editado 1 vez en total.)
Como un puto jarro de agua helada en mitad del sueño, así le cayó la noticia de que no habría descanso para la siguiente prueba. El Uchiha, al contrario que el resto de competidores, no trabajaba por uno. Trabajaba por cuatro. Si bien sus clones no le transmitían el cansancio de cada uno, el mero hecho de mantenerles activos por tanto tiempo suponía un estrés mental considerable. Eso, y que tenía tan poco chakra en su cuerpo que se sentía débil. Frágil.
—Me cago en mi puta vida… —farfulló, encontrando la misma cara de cansancio en cada uno de sus compañeros de trabajo.
Al menos, tenía a Juro para ayudarle. Una gran suerte, pues no se veía con las energías de estrujarse el cerebro en busca de un nombre original y pegadizo.
—Égida, me gusta —reconoció, aceptando aquel nombre propuesto a la primera—. Sí, lo de las flores no parece muy complicada. Tres figuras de nueve flores cada una, no suena complicado.
Pulir el arma hasta dejarla reluciente como una joya y afilada como una aguja era otro cantar, desde luego. Suspiró. Suspiró cuatro veces, y entonces asintió. No valía de nada posponerlo más. Cuanto antes se pusiese manos a la obra, antes terminaría.
No obstante, tras dar instrucciones a sus compañeros para ponerse a trabajar, el Uchiha recibió el aviso de Juro: la tramposa estaba de nuevo al acecho.
—Confío en ti —dijo, mirando a uno de sus clones, cuando en realidad hablaba a Juro.
Confiaba en él, pero iba a mandarle una ayudita. Localizó al clon con aspecto de hombre con pelo largo, y, disimuladamente, con la mano pegada al costado, señaló con un dedo hacia su derecha.
El clon, ya situado en primera fila, activó el Sharingan —quedando este oculto por el Henge—, y se aproximó, despacio, a Juro. Sabía que era él pues sus ojos, claro, eran capaces de atravesar aquel pequeño disfraz. Quedó a unos cinco metros de su posición, con gente en medio. Por el momento, iba a quedar en un segundo plano, vigilante.
—Me cago en mi puta vida… —farfulló, encontrando la misma cara de cansancio en cada uno de sus compañeros de trabajo.
Al menos, tenía a Juro para ayudarle. Una gran suerte, pues no se veía con las energías de estrujarse el cerebro en busca de un nombre original y pegadizo.
—Égida, me gusta —reconoció, aceptando aquel nombre propuesto a la primera—. Sí, lo de las flores no parece muy complicada. Tres figuras de nueve flores cada una, no suena complicado.
Pulir el arma hasta dejarla reluciente como una joya y afilada como una aguja era otro cantar, desde luego. Suspiró. Suspiró cuatro veces, y entonces asintió. No valía de nada posponerlo más. Cuanto antes se pusiese manos a la obra, antes terminaría.
No obstante, tras dar instrucciones a sus compañeros para ponerse a trabajar, el Uchiha recibió el aviso de Juro: la tramposa estaba de nuevo al acecho.
—Confío en ti —dijo, mirando a uno de sus clones, cuando en realidad hablaba a Juro.
Confiaba en él, pero iba a mandarle una ayudita. Localizó al clon con aspecto de hombre con pelo largo, y, disimuladamente, con la mano pegada al costado, señaló con un dedo hacia su derecha.
El clon, ya situado en primera fila, activó el Sharingan —quedando este oculto por el Henge—, y se aproximó, despacio, a Juro. Sabía que era él pues sus ojos, claro, eran capaces de atravesar aquel pequeño disfraz. Quedó a unos cinco metros de su posición, con gente en medio. Por el momento, iba a quedar en un segundo plano, vigilante.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado