11/08/2020, 19:06
— Soy UNA kunoichi de la Lluvia. Y estaba buscando un alojamiento
La visión de la bandana de Amegakure, que el hombre había obviado por completo, sería suficiente para amilanar al más aguerrido de los civiles del país. Pero las palabras de Ren remataron la faena, haciendo que el hombre reculase un paso antes de volver a hablar con la kunoichi, esta vez con tono conciliador.
— E-Era una broma, claro. No nos quedan habitaciones... bueno, nos queda una pero la habíamos cerrado porque tiene un par de goteras. Si la quieres, es tuya. Te la dejo gratis, siempre que nos permitas darte una buena comida y la pagues, claro.
Si tenía que elegir entre tener una habitación cerrada por goteras o dejársela a un ninja de la lluvia que se gastase su dinero en el restaurante, pues la decisión estaba clara. Incluso deberían felicitarle por servir a la patria.
La visión de la bandana de Amegakure, que el hombre había obviado por completo, sería suficiente para amilanar al más aguerrido de los civiles del país. Pero las palabras de Ren remataron la faena, haciendo que el hombre reculase un paso antes de volver a hablar con la kunoichi, esta vez con tono conciliador.
— E-Era una broma, claro. No nos quedan habitaciones... bueno, nos queda una pero la habíamos cerrado porque tiene un par de goteras. Si la quieres, es tuya. Te la dejo gratis, siempre que nos permitas darte una buena comida y la pagues, claro.
Si tenía que elegir entre tener una habitación cerrada por goteras o dejársela a un ninja de la lluvia que se gastase su dinero en el restaurante, pues la decisión estaba clara. Incluso deberían felicitarle por servir a la patria.