15/08/2020, 19:00
— ¿Y qué? Yo también puedo echarte alguna que otra
Ren entonces le echaría otra foto mientras la apartaba con una mano en su cara y otra alejandole aún más el telefono.
— ¡Reeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeen! No vale, tus brazos miden como tres metros. ¡Dameloooooooo!
La solución de Hana sería aplastar su cara aún más contra la mano de Ren. Estiró sus bracitos tanto como podía para alcanzar el movil, sin hacer ningún tipo de progreso. De tanto presionar al final se resbaló de la mano de Ren, cayendo directamente sobre sus generosos pechos de cara y abrazándose a ella con fuerza para no caer al suelo.
Ren entonces le echaría otra foto mientras la apartaba con una mano en su cara y otra alejandole aún más el telefono.
— ¡Reeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeen! No vale, tus brazos miden como tres metros. ¡Dameloooooooo!
La solución de Hana sería aplastar su cara aún más contra la mano de Ren. Estiró sus bracitos tanto como podía para alcanzar el movil, sin hacer ningún tipo de progreso. De tanto presionar al final se resbaló de la mano de Ren, cayendo directamente sobre sus generosos pechos de cara y abrazándose a ella con fuerza para no caer al suelo.