21/08/2020, 11:29
Cuadros, jarrones, mesitas, paredes empapeladas, una horrible alfombra igual de cara que el resto de objetos. El pasillo seguía igual que la última vez, salvo por la presencia de aquella puerta. La madera de tanto las puertas como de las mesitas, tenía pinta de ser de una alta calidad y por índole, bastante caro; algunos jarrones tenían dibujos pintados o tallados pero ambos a mano, la mayoría le parecían horribles pensaba la genin. Abrió la primera puerta de aquel pasillo, como hizo la última vez para investigar cada una de las salas, pero no procedió a hacer lo mismo con las demás, tan solo caminó hasta el final del pasillo coronado por un ventanal.
— ¿Hice algo especial? Solo miré habitaciones y poco más; ni un botón, palanca o...
Y cuando se giró, volvió a ver aquella puerta de papel adornada. Y al igual que la primera vez, como si cazara un conejo blanco, corrió hasta la puerta con la esperanza de que no se desvaneciera antes de llegar; abriéndola de golpe nada más la alcanzara.
— ¿Hice algo especial? Solo miré habitaciones y poco más; ni un botón, palanca o...
Y cuando se giró, volvió a ver aquella puerta de papel adornada. Y al igual que la primera vez, como si cazara un conejo blanco, corrió hasta la puerta con la esperanza de que no se desvaneciera antes de llegar; abriéndola de golpe nada más la alcanzara.