22/08/2020, 07:01
Ah, pero ahora el rostro noble transmutó, de pronto, hacia un acentuado gesto ofendido. Una vena se le infló en la frente, para más teatralidad. No es que estuviera furioso, es que estaba apretando los músculos tan fuerte para que la sangre se le subiera a la cabeza que temió, por un instante, que se le fuera a escapar un pedo. Por suerte, no sucedió.
Pero el caso, es que el Lord Hamasaki estaba indignado. ¡Indignado!
—P...pero cómo es que osáis a... ¡a! —alzó la barbilla. ¡Indignado!—. ¡Esto es un despropósito! ¡Un desvarío indigno de la nobleza! ¡No puedo esperar a ver qué piensa Umigarasu-sama del despiste de sus chambelanes!
Pero el caso, es que el Lord Hamasaki estaba indignado. ¡Indignado!
—P...pero cómo es que osáis a... ¡a! —alzó la barbilla. ¡Indignado!—. ¡Esto es un despropósito! ¡Un desvarío indigno de la nobleza! ¡No puedo esperar a ver qué piensa Umigarasu-sama del despiste de sus chambelanes!