26/08/2020, 17:31
— Bien, por nosotros perfecto. Pero tendrás que pagar el peaje, lo cual son todas tus posesiones materiales, armas, ropa, te perdonaremos la bandana. Eso, o te das media vuelta y te vas.
— ¿Qué? De eso ni hablar — señaló al suelo claramente enfadada, al escuchar el precio de aquel peaje; si ese era el suyo, a saber cuál podría llegar a ser el de unos simples comerciantes o cualquier otro transeúnte. — ¡Cobráis un peaje abusivo a cualquiera que pase aquí por la cara! El autor de la carta decía explícitamente que no erais mala gente, que tal vez pudiera resolverse con el diálogo. Y quiero confiar en eso, así que dejad de asaltar a la gente; seguro que podéis ganaros la vida de otra forma
La inocencia de Ren siempre la hacía parecer estúpida, solo por el hecho de confiar en que todo el mundo podía tener una segunda oportunidad. Aquello le pondría en peligro en más de una ocasión en el futuro.
— ¿Qué? De eso ni hablar — señaló al suelo claramente enfadada, al escuchar el precio de aquel peaje; si ese era el suyo, a saber cuál podría llegar a ser el de unos simples comerciantes o cualquier otro transeúnte. — ¡Cobráis un peaje abusivo a cualquiera que pase aquí por la cara! El autor de la carta decía explícitamente que no erais mala gente, que tal vez pudiera resolverse con el diálogo. Y quiero confiar en eso, así que dejad de asaltar a la gente; seguro que podéis ganaros la vida de otra forma
La inocencia de Ren siempre la hacía parecer estúpida, solo por el hecho de confiar en que todo el mundo podía tener una segunda oportunidad. Aquello le pondría en peligro en más de una ocasión en el futuro.