3/09/2020, 23:47
El gyojin no pareció sorprendido por la reacción de Daruu, que inoculaba lo que sentía acerca del Uchiha sin ningún tipo de filtro. Para el Amedama, Akame era una rata que debía haber sido exterminada hace mucho tiempo y Kaido intuía que, de haber podido cambiar algo de su pasado, seguro que Daruu hubiese querido haber podido rajarle el cuello, allá en los Dojos, cuando tuvo la oportunidad. Siempre quedaría la duda de qué hubiera sido si lograba su ansiado cometido —estaba claro que Datsue, quizás, no podría ser su amigo después de aquello, por ejemplo—. pero vamos, que en estos casos, no suele haber mal que por bien no venga.
Lo que sí llamó la atención del escualo fue la parte en donde Daruu mencionó de lo que Kurama le había hecho a Ayame.
—Eh... ¿que Ayame qué? —pero entonces habló Zetsuo.
Muchas interrogantes. Demasiadas conjeturas. La verdad es que Kaido no podía ni quería mojarse porque no tenía información concisa que le fuera útil a la inteligencia de Amegakure, al menos en lo que a Akame, el sello y Kurama se refiere. Pero de lo que sí estaba seguro era de que, independientemente de quién haya clavado la daga; el escenario adecuado para que aquello sucediera fue propiciado por Uzushiogakure. O eso es lo que pensaba Akame, seguramente.
—No. Quizás ellos no hayan sido los culpables de su muerte, Pero Akame se sentía indudablemente traicionado por los suyos. A ver, que según él, su pupilo se la jugó, y armó un montaje para que le tildaran de traidor. El resto supongo que ya lo saben. Yo ya estaba con él cuando se fue hasta Uzu con esa técnica suya y se lo zurró —dijo, con voz monótona. Pero pronto descartó seguir hablando de Akame, ya tendría tiempo de hacerlo en su reunión con Datsue y Daruu. Eligió tratar asuntos más importantes ahora mismo—. Y sí, mucho me temo que de Kurama apenas sé su nombre. Así que suéltalo todo, venga. Con lujos y detalle.
Lo que sí llamó la atención del escualo fue la parte en donde Daruu mencionó de lo que Kurama le había hecho a Ayame.
—Eh... ¿que Ayame qué? —pero entonces habló Zetsuo.
Muchas interrogantes. Demasiadas conjeturas. La verdad es que Kaido no podía ni quería mojarse porque no tenía información concisa que le fuera útil a la inteligencia de Amegakure, al menos en lo que a Akame, el sello y Kurama se refiere. Pero de lo que sí estaba seguro era de que, independientemente de quién haya clavado la daga; el escenario adecuado para que aquello sucediera fue propiciado por Uzushiogakure. O eso es lo que pensaba Akame, seguramente.
—No. Quizás ellos no hayan sido los culpables de su muerte, Pero Akame se sentía indudablemente traicionado por los suyos. A ver, que según él, su pupilo se la jugó, y armó un montaje para que le tildaran de traidor. El resto supongo que ya lo saben. Yo ya estaba con él cuando se fue hasta Uzu con esa técnica suya y se lo zurró —dijo, con voz monótona. Pero pronto descartó seguir hablando de Akame, ya tendría tiempo de hacerlo en su reunión con Datsue y Daruu. Eligió tratar asuntos más importantes ahora mismo—. Y sí, mucho me temo que de Kurama apenas sé su nombre. Así que suéltalo todo, venga. Con lujos y detalle.