13/04/2021, 03:25
Ranko soltó una risilla.
—S-se supone que son de avena, pero estoy segura que madre le añade cosas que no debería. Cosas más… dulces. No me quejo, para nada.
Con todo su equipaje al hombro, Ranko asintió en dirección a Lyndis emprendieron la caminata.. La estación quedaba al sur de Tane-Shigai, así que caminaron rumbo al norte. No tardarían mucho en divisar los edificios entre los árboles. Ranko sacó el pergamino de nuevo y releyó la dirección que se encontraba al final.
—N-no recuerdo la última vez que vine aquí… —comentó la de la trenza mientras subían las escalinatas en los árboles para alcanzar el nivel de aquella ciudad tan curiosa —. M-mi familia tiene una casa en Notsuba, a-aunque padre quería conseguir un lugar aquí también… Se siente familiar, supongo, venir de un bosque a otro. Sería interesante vivir e-en los árboles, supongo.
Con la dirección en mano, Ranko tuvo que preguntar a varias personas, pues no estaba acostumbrada a andar en una ciudad sin calles y aquellos puentes entre los árboles se le hacían curiosos, pero al final dieron con una estructura enorme que parecía una colmena. No era tan imponente como el edificio del señor feudal, pero se notaba más extravagante. Era evidentemente una construcción humana y no la obra de avispas gigantes. Las puertas y ventanas estaban cerradas.
—Vive… ¿vive en un panal? —preguntó la castaña, más que curiosa. Miró a Lyndis con afable sonrisa, concediéndole el honor de tocar a la puerta —. ¿Estás lista para no comernos una croqueta?
—S-se supone que son de avena, pero estoy segura que madre le añade cosas que no debería. Cosas más… dulces. No me quejo, para nada.
Con todo su equipaje al hombro, Ranko asintió en dirección a Lyndis emprendieron la caminata.. La estación quedaba al sur de Tane-Shigai, así que caminaron rumbo al norte. No tardarían mucho en divisar los edificios entre los árboles. Ranko sacó el pergamino de nuevo y releyó la dirección que se encontraba al final.
—N-no recuerdo la última vez que vine aquí… —comentó la de la trenza mientras subían las escalinatas en los árboles para alcanzar el nivel de aquella ciudad tan curiosa —. M-mi familia tiene una casa en Notsuba, a-aunque padre quería conseguir un lugar aquí también… Se siente familiar, supongo, venir de un bosque a otro. Sería interesante vivir e-en los árboles, supongo.
Con la dirección en mano, Ranko tuvo que preguntar a varias personas, pues no estaba acostumbrada a andar en una ciudad sin calles y aquellos puentes entre los árboles se le hacían curiosos, pero al final dieron con una estructura enorme que parecía una colmena. No era tan imponente como el edificio del señor feudal, pero se notaba más extravagante. Era evidentemente una construcción humana y no la obra de avispas gigantes. Las puertas y ventanas estaban cerradas.
—Vive… ¿vive en un panal? —preguntó la castaña, más que curiosa. Miró a Lyndis con afable sonrisa, concediéndole el honor de tocar a la puerta —. ¿Estás lista para no comernos una croqueta?
Pensamientos (Plum) ✧ Diálogos (PaleVioletRed)