20/08/2021, 02:12
— Ahm... Sí, ahm... Íbamos a entrenar, ¿No?
—Tal vez quieren descansar del viaje, Hermana. Estaría bien disfrutar el lugar un momento.
— Todas estamos cansadas del viaje ¿no? Y para el máximo en un combate hay que estar descansadas. Así que luego más tarde lo haremos. O mañana
Y Chika, simplemente, asintió. Con la cabeza contra la mesa, dejandose llevar por la calidez que el amado mueble le proporcionaba, sencillamente, asentía. Cuanta razón tenían todas. Habían venido a entrenar, pero ¿qué era entrenar sin estar al cien por cien? Una tonteria. Y claro, estaban cansadisimas del viaje. Cuanta razón tenía Lyndis. Lo importante era relajarse y descansar y que nadie explotase a su hermana.
— Si quieres podemos adelantarnos a entrenar, Sagisō-san. Y dejamos a Zhaoren-san y a Chika-chan descansar tranquilas.
La peliazul se levantó de golpe, con cuidado de no lanzar la mesa por los aires.
— ¡Sí! ¡Eso! ¡Entrenar! Claro, a eso hemos venido. Vamos, Lyndis-san, Meme-chan. Toca entrenar.
Dio un par de palmadas con las manos para levantar los animos, sobre todo a la mayor que parecía completamente agotada. Quería entrenar, claro, pero no quería que Kimi sufriera daño ni tener que pegarle a Meme ni a Kimi. Al menos su hermana podría entrenar con Ranko mientras ella se peleaba con Lyndis y después ya rotarían. Que Meme se pegase con Lyndis mientras ella vigilaba a Ranko y Kimi eso también era una opción. La mejor opción de hecho.
—Tal vez quieren descansar del viaje, Hermana. Estaría bien disfrutar el lugar un momento.
— Todas estamos cansadas del viaje ¿no? Y para el máximo en un combate hay que estar descansadas. Así que luego más tarde lo haremos. O mañana
Y Chika, simplemente, asintió. Con la cabeza contra la mesa, dejandose llevar por la calidez que el amado mueble le proporcionaba, sencillamente, asentía. Cuanta razón tenían todas. Habían venido a entrenar, pero ¿qué era entrenar sin estar al cien por cien? Una tonteria. Y claro, estaban cansadisimas del viaje. Cuanta razón tenía Lyndis. Lo importante era relajarse y descansar y que nadie explotase a su hermana.
— Si quieres podemos adelantarnos a entrenar, Sagisō-san. Y dejamos a Zhaoren-san y a Chika-chan descansar tranquilas.
La peliazul se levantó de golpe, con cuidado de no lanzar la mesa por los aires.
— ¡Sí! ¡Eso! ¡Entrenar! Claro, a eso hemos venido. Vamos, Lyndis-san, Meme-chan. Toca entrenar.
Dio un par de palmadas con las manos para levantar los animos, sobre todo a la mayor que parecía completamente agotada. Quería entrenar, claro, pero no quería que Kimi sufriera daño ni tener que pegarle a Meme ni a Kimi. Al menos su hermana podría entrenar con Ranko mientras ella se peleaba con Lyndis y después ya rotarían. Que Meme se pegase con Lyndis mientras ella vigilaba a Ranko y Kimi eso también era una opción. La mejor opción de hecho.