20/08/2021, 19:41
Shunsuke, tardó en procesar la situación. De hecho parpadeó un poco al darse cuenta del aura de Datsue.
—¿Eh? ¿EHHHHHHHHHH? — Pegó otro brinco. —Ahhh, eras tú...— Su cara y su voz, denotaban bastante decepción.
Nao por su lado sintió que el pecho se le hizo de piedra. «Vaya chakra que tiene este... Si es que es, pesado. Joder, que bien que presume el rico con el pobre.» Se llevó una mano al esternón ante la dura presencia. Aunque igual luego se sorprendía de la actitud de zopenco del otro mentado ninja.
—¡Ha! Pues mira, si me hubieras hecho esa propuesta hace algún tiempo, me hubiera venido de perlas. Pero no, mira, que las armas que había, ya se consiguieron dueño, y es demasiado problemático intentar arrebatárselas ahora — Resopló. —¡Y no sé si confiar en primer lugar en que me puedas ayudar! Tú y ese enano de pelo tricolor sepultaron bajo tierra la última esperanza que tenía, así que esa se perdió para siempre. ¡Toda la vida se me ha complicado! — Alzó ambos brazos, aleteando como pájaro.
—Lo que necesitaba era tal vez, un buen ninja que supiera de técnicas de sellado y que no tuviera miedo de enfrentarse a Konda, pero de paso, necesito que proteja a Konda de Kid. ¡Es algo que no entenderías! Y ya no sé ni para qué lo intento...— Se cruzó de brazos.
Nao, quién se había mantenido a raya hasta el momento, sintió mucha curiosidad, y se acercó hasta dónde ambos. «Datsue trata de sonsacarle cosas con preguntas simples, pero este tipo habla mucho sin aclarar nada.» Nao además, estaba interesado en una cosa: No en el qué, sino en el porqué. Simplemente se puso a la par del Uchiha, tanto para entrar en la conversación como por seguridad.
—¿Por qué quieres atacar a Konda mientras alejas a Kid? — Le interrogó sin más.
—Konda ha obligado a mi familia a trabajar para él y quiero librarme de eso de una vez por todas.
—¿Eh? ¿EHHHHHHHHHH? — Pegó otro brinco. —Ahhh, eras tú...— Su cara y su voz, denotaban bastante decepción.
Nao por su lado sintió que el pecho se le hizo de piedra. «Vaya chakra que tiene este... Si es que es, pesado. Joder, que bien que presume el rico con el pobre.» Se llevó una mano al esternón ante la dura presencia. Aunque igual luego se sorprendía de la actitud de zopenco del otro mentado ninja.
—¡Ha! Pues mira, si me hubieras hecho esa propuesta hace algún tiempo, me hubiera venido de perlas. Pero no, mira, que las armas que había, ya se consiguieron dueño, y es demasiado problemático intentar arrebatárselas ahora — Resopló. —¡Y no sé si confiar en primer lugar en que me puedas ayudar! Tú y ese enano de pelo tricolor sepultaron bajo tierra la última esperanza que tenía, así que esa se perdió para siempre. ¡Toda la vida se me ha complicado! — Alzó ambos brazos, aleteando como pájaro.
—Lo que necesitaba era tal vez, un buen ninja que supiera de técnicas de sellado y que no tuviera miedo de enfrentarse a Konda, pero de paso, necesito que proteja a Konda de Kid. ¡Es algo que no entenderías! Y ya no sé ni para qué lo intento...— Se cruzó de brazos.
Nao, quién se había mantenido a raya hasta el momento, sintió mucha curiosidad, y se acercó hasta dónde ambos. «Datsue trata de sonsacarle cosas con preguntas simples, pero este tipo habla mucho sin aclarar nada.» Nao además, estaba interesado en una cosa: No en el qué, sino en el porqué. Simplemente se puso a la par del Uchiha, tanto para entrar en la conversación como por seguridad.
—¿Por qué quieres atacar a Konda mientras alejas a Kid? — Le interrogó sin más.
—Konda ha obligado a mi familia a trabajar para él y quiero librarme de eso de una vez por todas.