18/01/2022, 04:53
Kimi asintió, sonriente, y alzó una mano lenta y curiosa. Normalmente, ella nunca buscaría contacto con nadie más, aparte de Ranko, pero el brazo de Kimi no era exactamente el brazo de una persona. Para Meme, era el brazo de una muñeca. Estaba segura de que no se sentiría así si la Kaminari hubiese extendido su brazo de carne.
La pelirroja tocó con leve timidez los dedos de Kimi con los suyos, y su sonrisa se ensanchó.
—Es verdaderamente maravilloso. —dijo, embelesada por la prótesis. Procedió a dar toquecitos con todos sus dedos a la mano de Kimi, como si luchara entre las ganas de tomar su mano y el miedo de romper porcelana muy fina.
Por su parte, en el dojo, Ranko escucharía todo lo que Chika tenía que decirle. Enrojeció bastante ante algunos de sus comentarios.
—¿U-un d-día de e-en-en...? Oh, n-n-no, d-digo... Me gustaría pas- ¡pero n-no hoy! Hoy era para q-que todas entrenásemos y-y conviviésemos. Lyndis y yo… B-bueno… No esperábamos que hoy decidiéramos… Q-que hoy sucediera esto —Casi sin querer, Ranko se llevó dos dedos a los labios —. ¡N-no te preocupes por nosotras, Chika-san! E-es más, me disculpo si las hemos incomodado.
Ranko le dedicaría una profunda reverencia. Al alzarse, una gran sonrisa se mostraba bajo su intenso rubor.
—Oh, no. ¡N-no te preocupes, Chika-san! Hablaré con Goromise-san para que prepare todl a escondidas y mañana tendremos una muy bonita fiesta. ¡P-pastel incluído! Considéralo regalo de parte mía y de Meme.
Ranko no aceptaría negativas, pues el temor de haber incomodado a sus amigas con sus cariñitos improvisados le carcomía la mente.
La sirvienta, por mientras, parpadeaba ante la petición de Lyndis.
—Por supuesto, Zhaoren-sama. El tiburón de jade es de hecho el restaurante preferido de Ranko-sama, pues tiene una muy amplia variedad de carnes disponibles en su bufé. Claro que necesitaríamos confirmación por parte de Ranko-sama para cancelar la cena —Goromise le hablaba con sumo respeto, y le sonreía con paciencia —. ¿Quiere que vaya a buscar a Ranko-sama?
La pelirroja tocó con leve timidez los dedos de Kimi con los suyos, y su sonrisa se ensanchó.
—Es verdaderamente maravilloso. —dijo, embelesada por la prótesis. Procedió a dar toquecitos con todos sus dedos a la mano de Kimi, como si luchara entre las ganas de tomar su mano y el miedo de romper porcelana muy fina.
Por su parte, en el dojo, Ranko escucharía todo lo que Chika tenía que decirle. Enrojeció bastante ante algunos de sus comentarios.
—¿U-un d-día de e-en-en...? Oh, n-n-no, d-digo... Me gustaría pas- ¡pero n-no hoy! Hoy era para q-que todas entrenásemos y-y conviviésemos. Lyndis y yo… B-bueno… No esperábamos que hoy decidiéramos… Q-que hoy sucediera esto —Casi sin querer, Ranko se llevó dos dedos a los labios —. ¡N-no te preocupes por nosotras, Chika-san! E-es más, me disculpo si las hemos incomodado.
Ranko le dedicaría una profunda reverencia. Al alzarse, una gran sonrisa se mostraba bajo su intenso rubor.
—Oh, no. ¡N-no te preocupes, Chika-san! Hablaré con Goromise-san para que prepare todl a escondidas y mañana tendremos una muy bonita fiesta. ¡P-pastel incluído! Considéralo regalo de parte mía y de Meme.
Ranko no aceptaría negativas, pues el temor de haber incomodado a sus amigas con sus cariñitos improvisados le carcomía la mente.
La sirvienta, por mientras, parpadeaba ante la petición de Lyndis.
—Por supuesto, Zhaoren-sama. El tiburón de jade es de hecho el restaurante preferido de Ranko-sama, pues tiene una muy amplia variedad de carnes disponibles en su bufé. Claro que necesitaríamos confirmación por parte de Ranko-sama para cancelar la cena —Goromise le hablaba con sumo respeto, y le sonreía con paciencia —. ¿Quiere que vaya a buscar a Ranko-sama?
Pensamientos (Plum) ✧ Diálogos (PaleVioletRed)