10/04/2022, 16:35
El rostro de la morena se iluminó casi en el momento, y respondió entrecerrando sus destelleantes ojos azules por la humedad y la luz del sol que se reflejaba en estos. Cogió su mano momentaneamente con ambas manos, y volvió a ejercer fuerza en estos, pero sus manos temblaban mientras se mordia los labios de la emoción.
— Allí te esperaré — el pitido que determinaba que la salida se iba a producir de un momento a otro, la hizo sobresaltarse en el sitio. Ren correría a subirse en uno de los vagones— ¡E-En una semana en Tanzaku Gai! ¡T-Te estaré esperando!
La puerta de madera, con remaches metálicos y un redondo cristal se cerró frente a ella, por lo que Hana solo podría ver su "antena" y poco después esta se volvería a asomar. El pitido se repitió, y el ruido de la locomotora lo acompaño poco después mientras algunos trabajadores del ferrocarril se aseguraban de que la gente estuviera a una distancia prudencial antes de que comenzara su marcha. Un ruido mecánico empezaría a transmitirse desde el inicio, perdiendo fuerza cuanto más alejados estaban los vagones.
El enorme tren comenzó su marcha de forma paulatina, cogiendo velocidad. Ren respondió yendo al final de este, corriendo por los pasillos hasta llegar al final del último vagón, pudiendo ver como Hana poco a poco se alejaba de su vista. Choco contra la barandilla de seguridad que había al final del vagón en una especie de plataforma, apoyando las manos sobre esta mientras su pelo baila por el viento.
— Te quiero... — susurró.
Quedo completamente ensordecido por la gran distancia que ahora empezaba a volver a separarlas, y el ensordecedor ruido del traqueteo de las ruedas acompañado de la locomotora.
— Allí te esperaré — el pitido que determinaba que la salida se iba a producir de un momento a otro, la hizo sobresaltarse en el sitio. Ren correría a subirse en uno de los vagones— ¡E-En una semana en Tanzaku Gai! ¡T-Te estaré esperando!
La puerta de madera, con remaches metálicos y un redondo cristal se cerró frente a ella, por lo que Hana solo podría ver su "antena" y poco después esta se volvería a asomar. El pitido se repitió, y el ruido de la locomotora lo acompaño poco después mientras algunos trabajadores del ferrocarril se aseguraban de que la gente estuviera a una distancia prudencial antes de que comenzara su marcha. Un ruido mecánico empezaría a transmitirse desde el inicio, perdiendo fuerza cuanto más alejados estaban los vagones.
El enorme tren comenzó su marcha de forma paulatina, cogiendo velocidad. Ren respondió yendo al final de este, corriendo por los pasillos hasta llegar al final del último vagón, pudiendo ver como Hana poco a poco se alejaba de su vista. Choco contra la barandilla de seguridad que había al final del vagón en una especie de plataforma, apoyando las manos sobre esta mientras su pelo baila por el viento.
— Te quiero... — susurró.
Quedo completamente ensordecido por la gran distancia que ahora empezaba a volver a separarlas, y el ensordecedor ruido del traqueteo de las ruedas acompañado de la locomotora.