26/05/2022, 04:26
—Puedes llamarme Jun, no hay problema.
No quería inquirir mucho en eso, pero lo dejaba claro para que sepan que podían ser más informales con ella. Sobre todo porque ella lo era con todos y raramente nombraba a alguien por su apellido. Esperaba que sus compañeras no se sorprendieran si las llamaba por sus nombres y sin usar los honoríficos que tan común es en Oonindo.
—Ya veo. Que extraño. — Tampoco había que ser la persona más puntual del mundo para ver que un puñado de genins hagan una simple tarea. Pero, de todos modos, le extrañaba que fuera así.
»No, creo que no me suena. — No era tan raro que ninguna le conociese, había muchísimos ninjas en Ame como para que se conozcan entre todos.
¿Y ahora? ¿Deberían empezar a hacer la misión antes de que llegue su supervisor? Probablemente era lo más lógico y razonable. Pero a la Nara muy poco le importaba eso en ese momento. Como si ya no era tan responsable de costumbre, mucho menos lo iba a ser sin el supervisor en sala. Iba a tener que venir el mismísimo Ryutaro a decir que empiecen a trabajar para que ella se movilice un poco.
En esa habitación ya había encontrado algo que le llamó la atención y que se ponga a disposición de charla le ayudaba.
—Mmm... No, no es mi primera misión. Llevo un par hechas ya. — Soltó risueña mientras se acercaba a las dos chicas. —¿Ustedes son nuevas?
Aunque se dirigía a ambas, su mirada se había quedado clavada en los ojos de Sayori. No era intimidante, de hecho solo quería ser amigable. Pero había que ver como se tomaba tanta sociabilidad aquella chica.
No quería inquirir mucho en eso, pero lo dejaba claro para que sepan que podían ser más informales con ella. Sobre todo porque ella lo era con todos y raramente nombraba a alguien por su apellido. Esperaba que sus compañeras no se sorprendieran si las llamaba por sus nombres y sin usar los honoríficos que tan común es en Oonindo.
—Ya veo. Que extraño. — Tampoco había que ser la persona más puntual del mundo para ver que un puñado de genins hagan una simple tarea. Pero, de todos modos, le extrañaba que fuera así.
»No, creo que no me suena. — No era tan raro que ninguna le conociese, había muchísimos ninjas en Ame como para que se conozcan entre todos.
¿Y ahora? ¿Deberían empezar a hacer la misión antes de que llegue su supervisor? Probablemente era lo más lógico y razonable. Pero a la Nara muy poco le importaba eso en ese momento. Como si ya no era tan responsable de costumbre, mucho menos lo iba a ser sin el supervisor en sala. Iba a tener que venir el mismísimo Ryutaro a decir que empiecen a trabajar para que ella se movilice un poco.
En esa habitación ya había encontrado algo que le llamó la atención y que se ponga a disposición de charla le ayudaba.
—Mmm... No, no es mi primera misión. Llevo un par hechas ya. — Soltó risueña mientras se acercaba a las dos chicas. —¿Ustedes son nuevas?
Aunque se dirigía a ambas, su mirada se había quedado clavada en los ojos de Sayori. No era intimidante, de hecho solo quería ser amigable. Pero había que ver como se tomaba tanta sociabilidad aquella chica.