1/06/2022, 17:12
Hana estaba cayendo en una espiral de princesidad de la que no sabía si podría salir después, pero la culpa no era suya, sino de Ren, así que se dejaría caer. Infló el pecho, orgullosa y alzó el mentón, con claro gesto de superioridad.
— No sabía que podías pensar con tanta precisión. Bien hecho.
Ojeó todos los platos sobre la mesa, intentando decidirse por cual le apetecía más primero. Tras unos segundos se dio cuenta de que no podía decidirlo, todos se veían espectacularmente ricos. Tomó la decisión como lo haría toda una princesa, pasandole la pelota a su sirvienta.
— Ya deberías saber qué quiero primero, Ren. Ese es tu trabajo al fin y al cabo. Así que venga.
Y tras colocarse bien la tiara se cruzaría de brazos, a la espera de que Ren decidiese. Sinceramente, le era completamente indiferente lo que eligiera, pues lo quería todo y ya.
— No sabía que podías pensar con tanta precisión. Bien hecho.
Ojeó todos los platos sobre la mesa, intentando decidirse por cual le apetecía más primero. Tras unos segundos se dio cuenta de que no podía decidirlo, todos se veían espectacularmente ricos. Tomó la decisión como lo haría toda una princesa, pasandole la pelota a su sirvienta.
— Ya deberías saber qué quiero primero, Ren. Ese es tu trabajo al fin y al cabo. Así que venga.
Y tras colocarse bien la tiara se cruzaría de brazos, a la espera de que Ren decidiese. Sinceramente, le era completamente indiferente lo que eligiera, pues lo quería todo y ya.