5/06/2022, 05:10
El sensei sonrió al escuchar a las tres hablar y alzó ambas manos en gesto conciliador para tratar de que las kunoichis estuvieran menos nerviosas. Al menos parecían entender la idea inicial, pero sabía que aún faltaba bastante para que entendieran el significado total de sus palabras. Sin embargo, habían ya un paso importante al lograr que ellas tuvieran voluntad para poner su granito de arena en querer llevarse bien.
—Tranquilas, aprecio sus palabras y sus deseos. Realmente, esto se los decía más desde un punto de vista personal, y no tanto uno de sensei, ¿sí? — Se llevó las manos a la cintura. —Ante todo, quiero que sean sinceras, y yo seré siempre sincero con ustedes. Pero pueh, ya nos hemos atrasado mucho ¡Ahora si empezaré formalmente mi trabajo como su sensei!— Su sonrisa se borró y cruzó los brazos, observando a todos lados. —Hora de empezar su primera misión como equipo — Sacó un pergamino, el cuál lanzó al piso, desenrollándose .
El jōnin hizo un sello, y tres cajas de herramientas aparecieron de inmediato.
—Una para cada una. Las paredes de este cuarto son falsas, así que al remover las placas de metal encontrarán distinto equipo tecnológico. También lo hay en el techo. Deben desmontar todo el equipo y llevarlo luego a la bodega trasera de la academia. Por favor, traten de no dañar los aparatos, puesto que las piezas aún podrían repararse o desmantelarse para reciclarse — Empezó a caminar para afuera de nuevo. —Estaré en la sala de profesores, así que las veré por el pasillo cuando pasen para ir a la entrada de la bodega — Alzó la mano.
El tipo parecía querer salir, pero se dió la vuelta de pronto.
—Oh, por cierto. Quería decirles que quizá podríamos ponerle un nombre al equipo. Pueden pensarlo mientras trabajan, y cuando terminen la misión, me cuentan cuál es el que decidieron. Al final, ustedes serán las protagonistas — Les guiñó un ojo, y luego finalmente salió del recinto.