27/11/2022, 23:23
Miki torció el gesto. Tsubame no parecía ser tan manipulable como ella se imaginaba, y lo que era peor: parecía estar completamente ida. Vengarse de ella acabaría siendo mucho más molesto que satisfactorio, así que dejó ir aquellas ideas con un suspiro cansado.
— Tienes razón. Te lo prometimos. —Terminó por decir, recuperando la sonrisa—. De todos modos, debería volver. Suzume-chan necesitará compañía.
No añadió nada más. Simplemente caminaría hasta la puerta y esperaría a que Chika terminase lo que tuviese que hacer.
— Tienes razón. Te lo prometimos. —Terminó por decir, recuperando la sonrisa—. De todos modos, debería volver. Suzume-chan necesitará compañía.
No añadió nada más. Simplemente caminaría hasta la puerta y esperaría a que Chika terminase lo que tuviese que hacer.