6/12/2022, 17:30
La única persona que avanzó junto a ella fue Shio, quien intentaba convencerse de que, realmente, no había muerto tanta gente allí. Kimi sabía, o creía, que todas aquellas marcas no podían pertenecer de ninguna manera a la misma persona. Si lo fuesen, el cuerpo de aquella persona no podía andar demasiado lejos, pues se habría desangrado.
En lugar de rebatir su teoría, la chica buscó pruebas a su alrededor, buscando con atención algo que la lleve a algo. En lugar de encontrar nada nuevo, Kimi se encontró con que algo faltaba. Nadie más que Shio le hablaba y el resto no estaba a la vista. Habían desaparecido.
Estaban solas.
Cuando Shio se agarró a ella, Kimi la rodeó con el brazo y se la acercó instintivamente para protegerla. ¿Acaso habían caído en una trampa? ¿Un espíritu las había atacado? Probablemente no era nada tan grave. Debía estar exagerando o eso esperaba.
Al escuchar la voz de Suzume, Kimi respondió.
— Murakisho-san. —Le respondió, midiendo el tono para mostrar más calma de la que en verdad tenía—. No se mueva ¿de acuerdo? Vamos hacia allá.
Le dio un pequeño tirón a Shio para mantenerla junto a ella mientras seguía la voz de Suzume. En cuanto la alcanzase, la idol podría ver una mano metálica acercarse a ella entre la niebla para tocarle el hombro.
— Estamos aquí. ¿Está bien? ¿Sabe algo de Himura-san y Mitsu-san?
En lugar de rebatir su teoría, la chica buscó pruebas a su alrededor, buscando con atención algo que la lleve a algo. En lugar de encontrar nada nuevo, Kimi se encontró con que algo faltaba. Nadie más que Shio le hablaba y el resto no estaba a la vista. Habían desaparecido.
Estaban solas.
Cuando Shio se agarró a ella, Kimi la rodeó con el brazo y se la acercó instintivamente para protegerla. ¿Acaso habían caído en una trampa? ¿Un espíritu las había atacado? Probablemente no era nada tan grave. Debía estar exagerando o eso esperaba.
Al escuchar la voz de Suzume, Kimi respondió.
— Murakisho-san. —Le respondió, midiendo el tono para mostrar más calma de la que en verdad tenía—. No se mueva ¿de acuerdo? Vamos hacia allá.
Le dio un pequeño tirón a Shio para mantenerla junto a ella mientras seguía la voz de Suzume. En cuanto la alcanzase, la idol podría ver una mano metálica acercarse a ella entre la niebla para tocarle el hombro.
— Estamos aquí. ¿Está bien? ¿Sabe algo de Himura-san y Mitsu-san?