20/01/2025, 10:39
Toda aquella vorágine pasó en un solo segundo. Lo que parecía una pesadilla por parte de la pequeña Lily, se acabó convirtiendo un enorme descubrimiento que dejó a las dos ex kunoichis completamente perplejas. Ren bajó a toda prisa junto con Hana, algo paralizada por el miedo por no saber bien qué hacer, buscando seguir cualquier cosa que le pidieran, pero cuando Lily abrió los ojos se quedó congelada en el sitio. Y aún más cuando estos volvieron a su color natural azul. Un azul intenso, profundo y precioso... Un azul que Hana describía habitualmente como un pulido zafiro.
Tras lo acontecido, y nuevamente en la habitación temporal que tenían, Ren miraba al suelo con los ojos completamente abiertos. Estaba sentada en la cama deshecha por haber salido a toda prisa, con los dedos de sus manos entrelazados y entre sus piernas ligeramente abiertas.
Todo eso era una broma, ¿verdad? Estaban siendo víctimas de algún engaño, un genjutsu a gran escala o algo por el estilo; es lo que pensaba esbozando una débil sonrisa por el terror.
Tras lo acontecido, y nuevamente en la habitación temporal que tenían, Ren miraba al suelo con los ojos completamente abiertos. Estaba sentada en la cama deshecha por haber salido a toda prisa, con los dedos de sus manos entrelazados y entre sus piernas ligeramente abiertas.
Todo eso era una broma, ¿verdad? Estaban siendo víctimas de algún engaño, un genjutsu a gran escala o algo por el estilo; es lo que pensaba esbozando una débil sonrisa por el terror.