22/01/2025, 13:36
— Eso te lo acabas de inventar — dijo sin perder la sonrisa, y dejando escapar un pequeño bufido divertido ante aquel disparate. — En todo caso son los cuernos del peligroso demonio que habita en mi interior, buscando salir cuando estoy más débil y sin hacer un esfuerzo activo por retenerlo.
Puestas a decir tonterías y disparates, ella era la primera, había leído suficiente como para batallar un rato.
Puestas a decir tonterías y disparates, ella era la primera, había leído suficiente como para batallar un rato.