23/01/2025, 15:09
Cuando entraron en la calle principal pudieron ver cantidad de locales con mostradores y ventanas exhibiendo sus bienes. La mayoría eran cosas rurales como hortalizas y carnes, pero también había muebles y otras cosas más especializadas. Hasta que finalmente vieron uno con libros.
— Parece que sí tienen una libreria. Y si no te gustan mis pies helados, puedes irte a dormir con Yukiko. Seguro que ella no te roba el calor corporal, de hecho, diría que te acelera el pulso más que yo. — bromeó acercandose a ella para bajar a Lily. — Nosotras vamos a mirar los libros, tú sigue hasta la herrería, anda.
— ¿Qué? Pero yo también quiero ver donde nacen las espadas. — protestó Lily.
— Luego vamos nosotras a buscar a Mama Ren y vemos la herreria. Ahora vamos a buscarte unos bonitos colores para dibujar. — dijo Hana acuclillandose para hablar con Lily y ponerle bien el vestido.
— Parece que sí tienen una libreria. Y si no te gustan mis pies helados, puedes irte a dormir con Yukiko. Seguro que ella no te roba el calor corporal, de hecho, diría que te acelera el pulso más que yo. — bromeó acercandose a ella para bajar a Lily. — Nosotras vamos a mirar los libros, tú sigue hasta la herrería, anda.
— ¿Qué? Pero yo también quiero ver donde nacen las espadas. — protestó Lily.
— Luego vamos nosotras a buscar a Mama Ren y vemos la herreria. Ahora vamos a buscarte unos bonitos colores para dibujar. — dijo Hana acuclillandose para hablar con Lily y ponerle bien el vestido.