24/01/2025, 13:18
Antes siquiera de acabar la primera frase, la puerta se abrió de par en par.
— ¡Mama, mira! ¡El libro que buscabas! — gritó a los cuatro vientos una niña rubia agarrando un enorme libro con ambas manos.
Iría igual de rápido hacia Ren para darle el libro con una sonrisa de oreja a oreja como si le estuviese dando un lingote de oro macizo. El libro tenía en la portada varias espadas y su titulo rezaba "Gran enciclopedia de katanas y hojas forjadas". Si lo abría vería que tenía una sección para cada tipo de katana y derivados de ellas, con datos tecnicos y consejos para su forja. Además, tenía una buena encuadernación.
— ¡Lily! Te he dicho que me esperases. — la regañó Hana desde la puerta.
— ¡Mama, mira! ¡El libro que buscabas! — gritó a los cuatro vientos una niña rubia agarrando un enorme libro con ambas manos.
Iría igual de rápido hacia Ren para darle el libro con una sonrisa de oreja a oreja como si le estuviese dando un lingote de oro macizo. El libro tenía en la portada varias espadas y su titulo rezaba "Gran enciclopedia de katanas y hojas forjadas". Si lo abría vería que tenía una sección para cada tipo de katana y derivados de ellas, con datos tecnicos y consejos para su forja. Además, tenía una buena encuadernación.
— ¡Lily! Te he dicho que me esperases. — la regañó Hana desde la puerta.